Los chicos rechazan más los piropos que las chicas

Ellas perciben en mayor medida las desigualdades que ellos, pero sólo el 43,6% se considera feminista.

Las mujeres jóvenes se ven a sí mismas como inteligentes, trabajadoras e independientes. Pero ellos no comparten esta misma visión de sus compañeras: las consideran inteligentes y trabajadoras, sí, pero en lugar de independientes creen que el atributo de sensibles y tiernas las describe mejor. Para quien no crea en la importancia de celebrar el Día de la Mujer, basta con echar un vistazo al Barómetro Juventud y Género del Centro Reina Sofía-FAD, presentado ayer: el 53,1% de las jóvenes españolas afirma haber sentido algún tipo de discriminación, sobre todo en la calle, en el trabajo y en las redes sociales.

El barómetro –realizado a partir de entrevistas a 1.247 jóvenes de 15 a 29 años– destaca que de forma mayoritaria (un 56,4%) la juventud española advierte grandes desigualdades por motivo de género. Y aunque las mujeres lo perciben de forma más acentuada, llama la atención que los hombres sean más sensibles ante ciertos comportamientos inapropiados que ellas. Como el hecho de piropear por la calle: un 30% de hombres lo cree inadmisible frente a un 24,8% de mujeres. Así como que sea el hombre el que tenga que invitar en una cita o que la bebida alcohólica se le sirva a él.

En el ámbito laboral, la discriminación se traduce en menor salario, dificultad de acceso al mercado laboral y una mayor dificultad para la conciliación, denuncian las chicas. «Las de menor renta y estudios básicos son las más afectadas», puntualizó Anna Sanmartín, subdirectora del Centro Reina Sofía sobre Adolescencia y Juventud. Y, aunque es cierto que los jóvenes coinciden en que las orientaciones laborales no deben estar marcadas por el género, todavía perciben que determinados trabajos son más adecuados para los hombres, como por ejemplo la mecánica (55% de los chicos opina así frente al 38,8% de las chicas). Para las mujeres, ven más aptas profesiones relacionadas con el ciudado asistencial (33,4% de los chicos y el 21,4% de las chicas) , así como la docencia (23,6% versus 15,5%).

El ámbito familiar es donde más se percibe que la sociedad española ha avanzado en materia de igualdad. El hogar es el menos citado como escenario de desigualdades. De hecho, un 90% sienta las bases de su futura familia en la corresponsabilidad y el reparto equitativo de tareas. No obstante, queda camino por recorrer. El informe del Centro Reina Sofía revela que persiste con fuerza el tópico de que entre las prioridades de la mujer, la maternidad está por encima del trabajo. A nivel global (un 90%), tanto chicos y chicas quieren casarse y formar una familia en el futuro, pero el cuidado de los niños todavía se percibe como una tarea esencialmente femenina. Y lo que más llama la atención, la mayoría de los hombres (58,2%) está de acuerdo en que «trabajar está bien, pero lo que la mayoría de mujeres quiere es crear un hogar y tener hijos». Extraña más que un 42,5% de las encuestadas se sienta identificada con ello.

O no. Porque según el barómetro de la FAD cuatro de cada diez chicas jóvenes no se consideran feministas. Sanmartín reflexionó que quizá se deba a «la mala prensa» que tiene el término feminismo: «Esperábamos que hubiese una mayoría que se declarase feminista pero no ha sido así».