Seguridad

Unos okupas en Burgos instalan una alarma en una vivienda allanada: “Es cuando menos curioso…”

Los vecinos explican que la okupación, que ya ha sido denunciada por la propietaria, genera tensión en el municipio

Cartel de alarma en una vivienda
Cartel de alarma en una viviendaAmazon

Los okupas no se rinden. Desde distintas instituciones políticas se está intentando atajar el problema de la okupación con la aprobación de distintas medidas, tanto a nivel regional como nacional. Sin embargo, siguen logrando campar a sus anchas y los casos se multiplican. Solamente en 2024, los delitos por allanamientos y usurpación de vivienda en Españaaumentaron un 7%, con 16.426 casos registrados por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.

Además, estos okupas no trabajan al azar, sino que tienen un modo de actuar muy concreto, que se suele basar en seis pasos principales como explicó Álvaro Herreruela, experto en la materia. Sin embargo, como ha ocurrido en Burgos, a veces sorprenden con comportamientos que no son fáciles de entender para personas que han entrado de forma ilegal en una vivienda. 'Burgos Conecta' revela la última idea de los okupas del barrio de San Miguel de Pedroso, en Belorado: instalar una alarma.

Los okupas instalan una alarma de seguridad

Los vecinos explican lo ocurrido al mencionado medio: "Han colocado el cartel de la empresa que ha puesto la alarma en el inmueble". Aunque parezca totalmente incongruente por su forma de entrar en la casa, lo han hecho para evitar robos y otra posible okupación... como la que realizaron ellos mismos. Los vecinos no se lo pueden creer: "Es cuando menos curioso que hayan entrado sin permiso en una vivienda que no es suya, la hayan okupado y ahora la protejan de posibles robos u okupaciones".

Por si fuera poco, el medio indica que otros lugares cercanos a este barrio de Belorado también pueden tener okupas en las casas vacías. Estos okupas intentan buscar cualquier tipo de truco para afianzarse en la vivienda y retrasar su desalojo. En este caso han intentado empadronarse, pero sin éxito, según los vecinos. Ellos mismos explican que la propietaria ha formulado tres denuncias ante la Guardia Civil, pero que todavía siguen ahí.

El miedo invade a los vecinos

"Se vive tensión en el pueblo por la llegada de personas ajenas", así definen los vecinos la situación, nada agradable desde finales del pasado mes de abril. La vivienda, que llevaba en desuso casi dos décadas, está al final del pueblo y todo lo que había en su interior ha sido tirado a la calle por los okupas. No pudieron atajar la entrada en un primer momento porque, según explica el mencionado medio, los fines de semana el pueblo se llena de gente y es complicado distinguir.

¿Cómo identificar a los okupas?

Según explicó en un vídeo el mencionado experto Álvaro Herreruela, los okupas siguen seis pasos para entrar en una vivienda. Son los siguientes:

  • Hacen 'el paseíllo': "Buscan en casas sin movimiento", afirma nada más comenzar. Como explica el texto, esto significa que recorren los barrios durante días y toman nota de las viviendas vacías.
  • Marcan la puerta: "LSe organizan por grupos:o hacen con señales invisibles", revela. Durante varios días comprueban si alguien rompe esa señal. Si lo hacen, descartan ese piso. Suelen encontrarse en las puertas.
  • "Unos vigilan, otros entran", añade durante su explicación. Así pueden ver si alguien se acerca en el momento del asalto.
  • Llevan mochila: "Con herramientas como cizalla, taladro, cerradura nueva", explica sobre el material. Llevarlo hace que la entrada al piso sea más rápida.
  • Cambian la cerradura: "Ya tienen la llave", desvela. Indica que suelen llevarla ya hecha y al tener ellos la llave de entrada a la vivienda pueden demostrar morada.
  • Colocación de un cartel: "Ponen un cartel legal para frenar a la Policía", concluye sobre sus pasos. Este último se realiza para intentar simular que viven legalmente.

El cartel colocado en este caso en Burgos ha sido uno de seguridad y ha sorprendido a todos los vecinos del pueblo. Un ejemplo más de que los okupas, pese a entrar de forma lugar en los inmuebles, suelen acabar haciéndose fuertes si no son expulsados de inmediato.