Fraude
¿Renovación de la tarjeta sanitaria? Atento, es una estafa
¿Has recibido un aviso para “renovar” tu Tarjeta Sanitaria Individual (TSI)? Probablemente sea un engaño. Te contamos en qué consiste este fraude y cómo protegerte para no caer en la trampa.
El Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE) ha emitido una alerta por una nueva campaña de phishing que suplanta al Ministerio de Sanidad mediante correos electrónicos y mensajes de texto fraudulentos. Estos mensajes, que imitan el logotipo y diseño oficial del ministerio, comunican falsamente la necesidad de renovar la tarjeta sanitaria debido a la implantación de un nuevo sistema de verificación.
El objetivo de los ciberdelincuentes es recopilar información personal y de la tarjeta bancaria de los usuarios que acceden a los enlaces incluidos en estos mensajes. Los mensajes buscan generar sensación de urgencia, indicando que, si no se realiza la supuesta renovación, se perderá el acceso a los servicios sanitarios.
Cómo identificar la estafa
Entre los mensajes fraudulentos detectados, se incluyen mensajes que transmiten urgencia y poco tiempo para actuar, remitentes desconocidos o números de teléfono extraños en los SMS, correos electrónicos con logotipos incorrectoso dominios que no corresponden al oficial del Ministerio de Sanidad (sanidad.gob.es), y asuntos con errores ortográficos como “Su tarjeta sanitaria individual ha caducado.” “Actualiza su TSI” (con un error gramatical) o “Renovacion” (sin tilde).
Al pulsar en el enlace, los usuarios son redirigidos a una página web falsa, pero con la apariencia oficial, donde se solicita completar varios formularios con datos personales y bancarios. En algunos casos, estas páginas incluyen pasos como cálculos simples para “demostrar que eres humano” y selección de la Comunidad Autónoma, mostrando incluso los logos oficiales de las consejerías para dar mayor sensación de veracidad.
A continuación, aparece un resumen de la solicitud y se ofrece a la víctima enviar la tarjeta al domicilio por un módico precio de 2,99€, para los gastos de envío. Esta es la única opción para conseguir la supuesta tarjeta, ya que no aparece dónde se podría recoger.
Llegando al botón para pagar, se muestra un formulario de “Autenticación segura”. Supuestamente, te envían un código al número de teléfono para da sensación de seguridad a la transacción económica. Finalmente, aparece una ventana con una imagen en la que se simula la evolución de una serie de acciones, que nunca llegan a su fin.
En ese momento, los ciberdelincuentes ya estarán en posesión de todos los datos que has facilitado y podrán suplantar tu identidad o cometer otro tipo de fraudes.