El sexo en los mayores

Un precioso y estimulante estudio publicado por la revista Sexual Medicine sostiene que el placer sexual es más alto en personas mayores de sesenta y cinco años. En dicho trabajo te cuentan los porqués y cómo tener intimidad en las mejores condiciones, hasta te dan las posturas más apropiadas teniendo en cuenta los achaques propios de la edad, como la cucharita, la Andrómaca, el surfero o la glotona, y te aconsejan cómo higienizar la dentadura postiza después del sexo oral. Es muy gracioso cuando advierten de no usar mordazas ni otro tipo de ataduras bucales.

El caso es que la sexualidad, indican, puede ser muy gozosa en los viejitos, y yo no lo dudo, sobre todo si están más o menos sanos y tienen una pareja de confianza. Los hombres, señalan, tienen sexo hasta mucho tiempo después que las mujeres. En el Reino Unido, por ejemplo, los porcentajes son mucho más altos. En España sólo el sesenta y dos por ciento de los hombres de sesenta y cinco años o más y apenas el treinta y siete de las mujeres son sexualmente activos. ¿Y por qué lo son menos las mujeres? Yo así a golpe de observación y experiencia diría que los hombres cuando se jubilan dejan de trabajar, mientras que las mujeres siguen llevando el fardo de la casa y de los hijos. Para hacer el amor se necesita energía y tiempo, más aún a partir de una edad en la que todo se lentifica. Las mujeres están más cansadas. Por otro lado, si no tienes pareja estable, es seguro que pocos caballeros tirarán los tejos a las de su edad. Ellos las prefieren jóvenes. Aparte de que hay menos sobrevivientes. Por otro lado, las mujeres en general se fijan más en la inteligencia y delicadeza del señor, así que vamos reduciendo posibilidades. En fin, que ellas recurrirán a los juguetes placenteros. Porque lo que sí es cierto es que el sexo femenino funciona a cualquier edad.