Elon Musk, sobre la decisión de OpenAI de no convertirse en una organización con ánimo de lucro: "No cambia nada"

Como os contamos hace solo unas horas, OpenAI anunciaba que reculaba en sus planes para convertirse en una organización completamente con fines de lucro. Tras un aluvión de críticas y presiones (incluyendo las del propio Elon Musk y las de los fiscales generales que supervisaban el proceso), la compañía dirigida por Sam Altman decidió mantener el control general bajo su matriz original sin ánimo de lucro, aunque reestructurando su división comercial como una Corporación de Beneficio Público (PBC), similar a rivales como Anthropic o xAI (la empresa de IA del propio Musk).

Parecía un movimiento para calmar las aguas, pero para Elon Musk y su equipo legal, ha sido insuficiente. Consideran que este cambio es pura fachada.

Marc Toberoff, el principal abogado de Musk en el litigio contra OpenAI, ha declarado de forma contundente que el anuncio de OpenAI es una "finta transparente que no aborda los problemas centrales".

La guerra entre Musk y OpenAI continúa

Según el abogado de Musk, el problema de fondo persiste: "los activos benéficos han sido y seguirán siendo transferidos en beneficio de personas privadas, incluyendo a Altman, sus inversores y Microsoft". Consideran que esto sigue "traicionando" la misión fundacional de OpenAI, que era desarrollar inteligencia artificial en beneficio de toda la humanidad, no para el lucro privado.

Recordemos que esta guerra viene de lejos. Musk, uno de los cofundadores originales de OpenAI en 2015, abandonó la organización años después y ha sido extremadamente crítico con su deriva comercial y su alianza con Microsoft. Llegó a pedir a un juez que bloqueara la conversión a empresa con ánimo de lucro (petición que fue rechazada, aunque partes de su demanda siguen adelante) e incluso realizó una oferta fallida de 97.400 millones de dólares para comprar los activos de la matriz sin ánimo de lucro.

OpenAI, por su parte, no se ha quedado callada ante las nuevas declaraciones del equipo de Musk. Un portavoz de la compañía ha respondido calificando la continuación de la demanda de Musk como "infundada" y un "intento de mala fe para frenarnos", sugiriendo que el dueño de X y Tesla simplemente está usando el sistema legal para intentar obstaculizar a un competidor directo de su propia compañía de IA, xAI.

La batalla está servida y parece que la decisión de OpenAI de mantener formalmente el control bajo la entidad sin ánimo de lucro no ha sido suficiente para apaciguar a Musk. Él insiste en que la misión original ha sido "traicionada", mientras que OpenAI le acusa de actuar por interés propio para dañar a un rival. El culebrón sobre la estructura, la misión y el futuro de la organización que lidera la revolución de la IA generativa continúa.