Tecnología

Los dos peligros de tener siempre enchufados los cargadores

Un correcto uso de estos dispositivos puede ser efectivo a la larga

Cargadores de teléfonos y tablets
Cargadores de teléfonos y tabletsJae C. HongAgencia AP

Los aparatos electrónicos son una parte más de nuestras vidas. Desde la llegada de la electricidad su presencia en los hogares de todo el mundo se ha multiplicado exponencialmente hasta el punto de no poder vivir sin ellos.

El mundo actual no sería lo mismo sin las máquinas y aparatos electrónicos. Todo depende de estos entre los que destacan innovaciones capaces de revolucionar la historia como la lavadora o la nevera, dos imprescindibles que han mejorado la calidad de vida sustancialmente.

Otro aparato cuya existencia marca el ritmo de vida de los humanos es el teléfono móvil. Desde su expansión a principios de siglo estos han evolucionado sin igual hasta convertirse en auténticos ordenadores de bolsillo con potencias mayores a las imaginadas cuando las computadoras hicieron su aparición.

Todos estos aparatos necesitan de la electricidad para poder funcionar. Aunque la mayoría de electrodomésticos se encuentran todo el rato enchufados los aparatos móviles se alimentan de un cargador que conectado a la electricidad almacena energía para poder funcionar.

Así, nos pasamos el día pensando en la batería de nuestros aparatos donde en ocasiones quedarnos sin puede suponer toda una tragedia. Incluso, hay quien se ve obligado a cambiar momentos del día en busca de un enchufe que le proporcione vida a su teléfono u ordenador.

Aunque normalmente se pone el foco en los problemas que puede comportar tener enchufado el aparato largos periodos de tiempo el cargador también se ve afectado. Por esto a continuación repasamos los dos principales peligros que puede tener mantener nuestro cargador en el enchufe.

Cargador siempre enchufado

Es habitual contar con un cargador siempre en la toma de corriente en el hogar. Esto nos permite poder cargar nuestros dispositivos, especialmente el móvil, cuando nos vamos a dormir o llegamos a casa tras horas fuera.

Cuando desconectamos nuestro aparato ya cargado solemos mantener el cargador en la toma de corriente y esto podría ser todo un error. Los expertos destacan dos motivos que poco a poco lastran la vida del cargador y dificultan su correcto funcionamiento que después repercutirá en nuestros dispositivos más utilizados.

El primero tiene que ver con el gasto energético. Ahora más que nunca tras la subida exponencial de la luz la mayoría de las personas controlan hasta el mínimo gasto extra en sus hogares, algo que el cargador siempre conectado puede provocar. Aunque sea mínimo, tener el aparato siempre en la toma de corriente repercute poco a poco en la factura de la luz.

Además, el segundo peligro de esto se encuentra relacionado con la esperanza de vida del cargador. Sin ser tan conocida como la de las baterías de los móviles utilizar el aparato de forma errónea, como estar conectado en todo momento, disminuye poco a poco su vida provocando que los aparatos se carguen de forma más lenta.

Esto se debe a que las resistencias se encuentran siempre encendidas dispuestas a estar listas para trabajar, algo que reduce su vida. Si, además, lo mantenemos durante todo el año conectado para poder cargar nuestro móvil en todo momento el cargador perderá sus facultades rápidamente hasta llegar a ser un aparato con muy mal funcionamiento.