F-35 y Eurofighter, frente a frente: ¿qué caza es mejor?

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Aunque muy oculto entre los miles y miles de folios que componen los Presupuestos Generales del Estado, una de las partidas del “Anexo de inversiones reales y programación plurianual” del Ministerio de Defensa ha sido bautizada como programa de armamento nuevo, y ahí aparece uno de los puntos más esperados por las Fuerzas Armadas: “Avión sustituto del AV-8B y C.15M-2ª Fase”, es decir, la adquisición de una aeronave para reemplazar a los “Harrier” de aterrizaje y despegue vertical de la Armada y, oh sorpresa, los F-18 del Ejército del Aire, cuyas vidas útiles están prácticamente llegando a su fin, entre 2025 y 2029 según las últimas previsiones.

Este programa está dotado con 6.250 millones (90 de ellos para 2023) y se prolongará hasta, al menos, 2028. Y todo apunta, según explican varias fuentes militares consultadas por este periódico, que se trata de “la única solución común posible para ambos ejércitos”: la adquisición del caza estadounidense F-35 de Lockheed Martinen dos de sus versiones: la convencional (A) y la naval (B) de despegue corto y aterrizaje vertical.

La parte de la Armada puede resultar más o menos obvia, pero no lo es tanto la del Ejército del Aire, pues aunque la renovación de los F-18 estaba sobre la mesa, no está claro el modelo elegido para su sustitución. De hecho, este mismo año Defensa ha decidido la compra de 20 Eurofighter para reemplazar a los F-18 destinados en las Islas Canarias, más concretamente en la base aérea de Gando. En la actualidad, el Ejército del Aire tiene, sin contar los canarios, alrededor de 60 cazas F-18 repartidos entre Zaragoza (Ala 15) y Madrid (Ala 12).

Teniendo en cuenta la dotación del programa de sustitución (6.250 millones) y el precio de los F-35 (unos 75 millones en su versión A y 105 en la B, sin contar sostenimiento ni repuestos ni armamento), España podría cubrir sin problemas la flota actual de 12 “Harrier” para la Armada y adquirir un número significativo para el Ejército del Aire, pudiendo completar su flota con más Eurofighter. Fuentes militares vaticinan que se habla de una docena para la Armada y al menos 18 para el Aire, lo que completaría en este último caso un escuadrón.

Pero, qué avión es mejor actualmente, el F-35 estadounidense o el Eurofighter europeo.

Eurofighter

Partamos de la base de que el F-35, junto con el F-22, es el mejor avión de combate del mundo para muchos expertos militares, con lo cual, a partir de aquí cualquier comparativa quedaría desvirtuada. Es importante también añadir que el caza estadounidense está considerado como un aparato de quinta generación, no así el Eurofighter, que se podría situar en una categoría definible como de “cuarta generación y media”. Otros cazas actuales, como por ejemplo el F-18 del Ejército del Aire español, habría que situarlos en tercera generación y los que se han modernizado (por suerte, la mayoría) en una “casi cuarta generación”.

El Eurofighter Typhoon se concibió para dotar a varias fuerzas aéreas europeas de un caza de defensa aérea que fuera superior en todos los aspectos a la última generación de aviones de guerra soviéticos del momento.

En servicio desde 2004, es el avión de combate más moderno que opera el Ejército del Aire. Surgió de la estrecha colaboración entre países europeos: España, Alemania, Italia y Reino Unido. El Ejército del Aire español cuenta actualmente con unas 70 unidades en servicio de este caza, a los que se añadirán los 20 adquiridos este mismo año para sustituir a los F-18 destinados en las Islas Canarias.

Con casi 16 metros de longitud y un peso en el despegue de casi 23.000 kilos, el Eurofighter es un cazabombardero de superioridad aérea y ataque al suelo con dos motores y ala en delta diseñado y construido por una agrupación de empresas europeas.

El Eurofighter proporciona superioridad aérea de manera efectiva tanto en escenarios más allá del alcance visual (BVR) como en combate cuerpo a cuerpo (CIC). Además, es ideal para el apoyo aéreo cercano, ya que puede permanecer en la tarea durante largos períodos con cargas de armas grandes y flexibles, como Paveway IV y el arma de ataque de precisión aire-superficie Brimstone. El sofisticado conjunto de sensores que incluye Datalink y Laser Designator Pod (LDP) permite una estrecha coordinación con los comandantes en tierra y la identificación de objetivos individuales, mientras que la alta maniobrabilidad permite operaciones efectivas en el campo de batalla.

Normalmente está armado con un cañón automático mauser de 27 mm y 13 puntos de anclaje externos que pueden llevar misiles aire-aire y aire-tierra de diversos tipos, así como bombas, pods de designación de blancos o guerra electrónica y depósitos de combustible eyectables.

De hecho, han empezado a usar el misil Meteor y recientemente realizaron ejercicios con dos bombas GBU-10 y dos GBU-16, de fabricación estadounidense, equipadas con el sistema de guiado por láser Paveway, lo que permite aumentar la precisión de las bombas con un sistema “económico y fiable”.

Este tipo de bombas es uno de los sistemas de los que dispone el Ejército del Aire español para misiones aire-superficie. El Ejército del Aire mantiene el guiado Paveway II para los cuerpos de bombas MK-82 (GBU-12), MK-83 (GBU-16) y MK-84 (GBU-10), mientras que utiliza el Paveway III para cuerpos penetradores BLU-109 y para el penetrador correspondiente a la BPG-2000 (bomba penetradora guiada de 2 000 libras), según explica la propia Fuerza Aérea.

En el caso de los sistemas de guiado Paveway II llevan emisiones láser codificadas que incrementan su resistencia a las contramedidas y permiten el ataque a múltiples objetivos en una sola pasada.

Sus dos motores gemelos Eurojet EJ2000 le permiten alcanzar una velocidad punta de Mach 2 a gran altura, ofrecen 1.000 horas de vuelo sin necesidad de mantenimiento no programado y puede mantener lo que se denomina ‘supercrucero’: velocidad supersónica sin el uso de postquemadores. Puede alcanzar hasta 19.800 metros de altura y su radio de combate oscila entre 185 y 750 km dependiendo del armamento; supera los 3.790 km en vuelo de reposicionamiento.

Además, solo el 15% de la superficie de la aeronave es metálica (el 75 % del avión está fabricado con compuestos de fibra de carbono), lo que según la compañía ofrece un funcionamiento sigiloso aunque son muchos los expertos que creen que, aun así, está lejos de la capacidad de sigilo del F-35.

En cuanto a sus sensores, dispone de un sensor de infrarrojos que permite detectar y rastrear simultáneamente múltiples objetivos y maniobras. Llama la atención también elhead up display (HUD) de gran angular, que proporciona al piloto una guía visual estable y precisa, compatible con gafas de visión nocturna y protección láser.

Cabe destacar que el año pasado se firmó un contrato para la mejora de los Eurofighter que representa una evolución de las capacidades de la aeronave. En conjunto, este paquete hace que el sistema de armas sea mejor y más versátil para las fuerzas aéreas de los usuarios finales. También se mejora significativamente la interoperabilidad de la plataforma con las fuerzas de la coalición a través de mejoras en el MIDS y las radios. Los cambios en los formatos de visualización de la cabina se derivan de los comentarios de la comunidad de operadores que han solicitado ciertas modificaciones para mejorar la interacción entre el piloto y la máquina.

F-35

El F-35, por su parte, es un caza de peso medio y monomotor, similar a una versión más pequeña, más convencional y con un solo motor, del Lockheed Martin F-22 Raptor pesado y bimotor, y de hecho ambos modelos comparten muchos elementos comunes.

Ofrece toda la capacidad de quinta generación, que se define, fundamentalmente, por la combinación de sigilo, sensores avanzados, fusión de información y conectividad de red, todo incluido en un caza supersónico, de largo alcance y altamente maniobrable. Con toda esta tecnología, estamos ante un caza polivalente capaz de ejecutar con éxito todas y cada una de las misiones que se le encomienden. Donde los cazas de cuarta generación actualmente se ven obligados a adaptarse al nuevo escenario de batalla, el F-35 marca la pauta.

Para empezar, la cabina del piloto ya es de por sí todo un compendio de lo más avanzado en tecnología: se utilizan tres pantallas frontales multifunción a color (MHDD) para la situación táctica general, que presentan «la situación del ataque, los formatos de ataque, las pantallas de mapas y los procedimientos de tráfico aéreo, además del estado del sistema y las listas de verificación». La fusión de todos sus avanzados sensores crea una única imagen integrada del campo de batalla que

Su variedad de sensores permiten ver todo lo que rodea al piloto y al avión con gran precisión. Su sistema informático sintetiza y prioriza la información e indica “quiénes son los buenos y los malos”.

Otra de las joyas que complementan toda esta tecnología es su casco, que ha cambiado la descripción del trabajo del piloto. Toda la información que necesitan para completar sus misiones (velocidad aérea, rumbo, altitud, información de objetivos y advertencias) se proyecta en la visera del casco, en lugar de en una pantalla de visualización tradicional en la cabina.

Con múltiples sensores integrados en el avión a través de su Sistema de Apertura Distribuida (DAS), los pilotos del F-35 tienen una vista de 360 grados del exterior en sus visores: arriba, abajo y alrededor. “El piloto ve todo lo que le preocupa en el suelo y en el horizonte, incluso hasta el punto en que puede mirar entre sus piernas, debajo del avión y ver todo el camino hasta el suelo”, dijo a The Washington Post Billie Flynn, piloto senior de pruebas experimentales de Lockheed Martin.

Gracias a su hiperconectividad dentro de una red segura, el F-35 puede realizar ataques cinéticos y no cinéticos con un efecto mucho mayor que otros aviones tácticos. Se pueden transportar internamente más de 2,2 toneladas de municiones mientras se maximiza el sigilo o, si las circunstancias lo exigen, el caza también puede transportar cargas externas para casi 10 toneladas de artillería. De cualquier manera, un F-35 puede destruir con precisión múltiples objetivos en un solo vuelo y correr muchos menos riesgos que el resto de cazas.

En cuanto a su modo sigilo, aunque la invisibilidad total no existe, la forma del avión está diseñada para desviar la energía del radar lejos de la fuente como un espejo inclinado. Su superficie también está suavizada para permitir que la energía del radar fluya suavemente a través de ella, de manera similar al agua que fluye a través de una superficie lisa. Además, para aquellas partes difíciles de “ocultar” o tratar con materiales absorbentes de radar, como la cara del compresor del motor, quedan ocultas a la vista directa de los radares. Cabe destacar también que las sondas y elementos convencionales del avión están alojadas internamente para aumentar el sigilo. Al final, el objetivo es que, para cuando el enemigo pueda escuchar un F-35 sea demasiado tarde para que reaccione.

A todo esto hay que añadir su motor Pratt & Whitney F135, uno de los más potentes del mundo, que le permite un Mach 1.6, haciendo del F-35 un caza supersónico de largo alcance, incluso con un complemento completo de armas internas y combustible. Y, de cara a la guerra electrónica, cuenta con capacidades EW avanzadas para localizar/rastrear fuerzas enemigas, bloquear radares e interrumpir ataques.

En cuanto a armamento, una de sus ventajas es, quizás, una de sus limitaciones, pues todas las características que le convierten en un avión casi invisible a los radares, también le impiden llevar armamento “exterior”: todo va integrado. Esto limita su capacidad a cuatro misiles aire-aire o dos misiles aire-aire y dos aire-tierra, que pueden ser misiles de crucero aire-superficie AGM-154 JSOW, AGM-158 JASSM, anti-buque Joint Stike Missile o antitanque Brimstone; aire-aire de corto alcance como el AIM-9X Sidewinder o el AIM-132 ASRAAM; o el aire-aire BVR AIM-120 AMRAAM.

Actualmente, la Fuerza Aérea de EE. UU. trabaja en un nuevo programa para desarrollar un arma de ataque aire-tierra furtiva que el F-35 podría usar para destruir las defensas aéreas enemigas. La Fuerza Aérea se está enfocando en descubrir cómo luchar en un entorno disputado contra un enemigo avanzado como China o Rusia y su avanzada tecnología. La Fuerza Aérea señaló que se estaba preparando para avanzar con el programa SIAW (Stand-in Attack Weapon o armas de ataque furtivas) con el objetivo de adquirir un total de 42 misiles. Al contrario de los misiles de lanzamiento a distancia, diseñadas para ser disparadas fuera del alcance de las defensas enemigas, generalmente por un avión como un B-52, los misiles furtivo tienen un alcance más corto, pero son transportadas por aviones de baja detectabilidad, como el mismo F-35.

Este avión es el descendiente del X-35 presentado por Lockheed-Martin en el programa Joint Strike Fighter (JSF). El 24 de octubre de 2001 el prototipo X-35 fue anunciado como vencedor del concurso, que traía aparejado un contrato de 200.000 millones de dólares para fabricar el nuevo avión. El F-35 realizó su primer vuelo el 15 de diciembre de 2006.

En la financiación del programa colaboran, además de los Estados Unidos, Reino Unido, Italia, Australia, Canadá, Dinamarca, Países Bajos, Noruega y Turquía, que aportaron fondos adicionales, razón por la cual a España le costaría más cara su compra, al incorporarse a un proyecto en el que no ha participado desde el inicio.

¿Cuál es mejor?

En definitiva, ¿qué avión es mejor? Pues aunque a priori la superioridad del F-35 pueda parecer abrumadora, a la hora de la verdad, y dependiendo de las necesidades, la diferencia no es tanta. En lo que se refiere a prestaciones en vuelo, ambos son bastante similares aunque el Eurofighter tiene varias ventajas, entre ellas sus dos motores que le dan una mayor maniobrabilidad.

Y aunque su brutal tecnología lo convierte en imbatible, también es cierto que el F-35 requiere de mayor apoyo en tierra y su pilotaje requiere manos muy expertas para sacarle todo el partido posible. También es mejor el Eurofighter en letalidad por cuanto puede llevar más armamento, es más rápido que el avión estadounidense (Mach 2.0 frente a 1.6) y puede volar a más altura.

En todos lo demás, muy especialmente en sus características de sigilo y de infiltrarse en el espacio aéreo enemigo sin ser detectado, no hay color. El F-35 gana por goleada, así como en integración de sensores y “situational awareness”.

No hay que olvidar tampoco que el Eurofighter sigue evolucionando y, así, ya se trabaja en mejoras, como el nuevo radar de barrido electrónico Escan adquirido por España y Alemania.