El enfrentamiento entre Israel e Irán se intensificó el 13 de junio tras el inicio de una ofensiva israelí que incluyó ataques contra instalaciones estratégicas iraníes, entre ellas centros militares y nucleares. La respuesta de Irán no se hizo esperar, con el lanzamiento de misiles y drones contra varias ciudades israelíes, lo que ha causado víctimas y daños en zonas urbanas. Mientras las hostilidades continúan por quinto día consecutivo, países como Estados Unidos han reforzado su apoyo defensivo a Israel. El G7 ha pedido una desescalada inmediata para evitar un conflicto regional de mayor alcance, aunque las tensiones siguen sin dar señales de reducirse. Ante esta nueva situación internacional, el experto en seguridad Chema Gil ha analizado cómo afecta a España esta última ofensiva en Oriente Medio.

Un problema emergente para España

Chema Gil, analista en seguridad internacional, advirtió este martes en 'El programa de Ana Rosa' que el conflicto entre Israel e Irán ya no es una amenaza futura, sino una realidad palpable. “Ellos ya están en una guerra abierta, total”, afirmó. Según Gil, los últimos movimientos militares revelan un cambio estratégico importante: “Se están moviendo los ajedreces, que fueron modificados específicamente para incluso llevar armamento nuclear lanzado por gravedad, bombas por gravedad”. Añadió que Israel habría atacado con bombas antibúnker tipo Blue 109, lo que hace prever una destrucción masiva en zonas clave como la de Ispahán, donde se concentran instalaciones nucleares iraníes. Además, señaló que “la inteligencia humana está operando dentro de Irán desde hace ya mucho tiempo” y que el reciente asesinato de Ali Salmani, jefe del ejército iraní apenas cuatro días después de sustituir a su predecesor, demuestra que “Israel tiene una inteligencia absolutamente abrasiva”.

Respecto al impacto en España, Gil fue claro: “Si se cierra el techo del mundo, tenemos un problema”. Se refería al estrecho de Ormuz, por donde circula aproximadamente el 20 % del comercio mundial de petróleo. Advirtió que “el precio del barril ya está subiendo” y que podríamos enfrentar un fuerte encarecimiento energético.