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Alberto Guijarro, codirector de Primavera Sound: “Sin duda, España es una buena anfitriona de festivales de música”

Este fin de semana se celebra la decimonovena edición de una de las citas artísticas más icónicas del país y uno de los motores sociales y económicos de Barcelona: el clima, la gente y la cultura constituyen sus grandes bazas

Alberto Guijarro, codirector de Primavera Sound
Alberto Guijarro, codirector de Primavera Soundlarazon

Este fin de semana se celebra la decimonovena edición de una de las citas artísticas más icónicas del país y uno de los motores sociales y económicos de Barcelona: el clima, la gente y la cultura constituyen sus grandes bazas

Tame Impala, Miley Cyrus, Janelle Monáe, Robyn y Carly Rae Jepsen son algunos de los nombres que, esta noche, harán las delicias de los asistentes a la decimonovena edición de Primavera Sound. El festival, que se celebra hasta el próximo domingo, lleva a la capital catalana uno de los carteles más completos de la oferta musical española. Su organización y su producción son parte de sus señas de identidad. Algo que Alberto Guijarro, uno de sus directores, ha defendido siempre a capa y espada. “Está en nuestro ADN programar conciertos en sala que a la postre alimenten el interés por los festivales”. Así como en el de Barcelona.

Primavera Sound sobrevivió a la burbuja de festivales que estalló hace una década. ¿Existe otra ahora?

Más que algo así, parece que la oferta está poco diferenciada y que se replican modelos con demasiada cercanía en el tiempo y la localización. Como siempre, la clave está en saber dotar a los festivales de identidad propia en cuanto a formato, cartel y concepto.

¿Cómo han evolucionado ahora que España se ha convertido en el primer destino turístico de festivales de música del mundo?

No tenemos nada que envidiar a otros festivales internacionales y diría que estamos a la vanguardia en lo que a la producción, la organización y elservicio se refiere. Tenemos una sólida cultura festivalera labrada durante más de dos décadas y, actualmente, el público sabe bien lo que espera de un festival. Por eso, exige también en consecuencia.

¿Hay alguna diferencia destacable entre la nueva generación que acude al Primavera Sound y las anteriores?

Sí, la misma que se nota en cualquier otro ámbito. Son nativos digitales, pero al final les mueve la música como a quienes empezaron a venir en las primeras ediciones. Es ahí donde ambas generaciones confluyen y conviven sin ningún problema.

Cada año, llega el momento en que en Barcelona es notoria la llegada de esta cita. ¿En que lo reparan?

Nosotros ya nos encargamos de que se empiece a calentar el ambiente con el programa «Primavera a la Ciutat» y tenemos la suerte de ser la primera gran cita festivalera en Barcelona. Comienza el buen tiempo y pillamos al público con ganas de arrancar la temporada.

¿Qué vínculo encuentra entre el festival y el turismo?

En nuestro caso, resulta más evidente que en festivales que se encuentran fuera de núcleos urbanos. Nos consta que mucha gente se lo toma como una semana de vacaciones en Barcelona, aprovechando para disfrutar de la ciudad. Por eso, el festival está tan presente en otras partes de la misma, más allá del Forum.

¿Es España una buena anfitriona de festivales?

Sin duda, lo es. El clima, la gente y nuestra cultura de fiesta son los ingredientes ideales. Y si además las producciones son cómodas y seguras, lo convierten en el escenario ideal.

Un festival de música, ¿debe preocuparse por reflejar los problemas sociales o políticos de su entorno?

Sí, son cultura, espacios creativos y lugares de expresión. En ese sentido, tanto los artistas como el público no deben sufrir restricciones a su libertad de expresión. Como organización, el festival siempre ha estado comprometido con muchas causas sociales propias.

El perfil

Guijarro es uno de los promotores históricos de conciertos del país. Además, es codirector de Primavera Sound, así como el responsable de la sala de baile más longeva de Barcelona: la Apolo, que el pasado año celebró sus 75 años de vida.