No busca renovar la Justicia, sino su control
La urgencia de la izquierda para controlar al CGPJ viene dada porque en los próximos cinco años tendrá que renovarse al 70 por ciento de los magistrados del Tribunal Supremo.
La urgencia de la izquierda para controlar al CGPJ viene dada porque en los próximos cinco años tendrá que renovarse al 70 por ciento de los magistrados del Tribunal Supremo.
Como ya relatamos ayer, que el entorno de Más Madrid fuera quien echase el resto para movilizar la calle a favor del sanchismo dice mucho de por dónde pueden ir los tiros en la política madrileña y nacional. Mucho más ahora que Sumar y su rostro, Yolanda Díaz, vuelan con plomo en las alas
La democracia española no está en cuestión porque a Pedro Sánchez y al PSOE no le salgan las cuentas. Pero si alguien, el que sea, la pone en peligro, el Estado tiene medios más que suficientes para defenderla.
No ha dejado de sorprender, incluso en ámbitos socialistas, que las principales movilizaciones callejeras para la permanencia de Pedro Sánchez hayan sido muñidas por entidades y personas ligadas al entorno de Más Madrid
Parece que la buena sintonía de los republicanos con La Moncloa, tras la concesión de los indultos a los condenados por el procés, tal y como la perciben sus votantes, va a pasarles factura.
Todavía hay quienes no dan crédito a la intervención de Irene Montero en un «podcast» feminista, viralizado en las redes sociales, en la que reconocía haberse «liado con personas de derechas antes de la política institucional y, la verdad, tan ricamente»
En ningún caso se justifica una dialéctica que sitúa a más de media España, la que no ha votado a Pedro Sánchez, fuera de los parámetros de la democracia y excluida del debate público.
Algunos en el PP –y ya hay que ser, digámoslo así, despistados– se han indignado al ver cómo el titular de la cartera de Agricultura, Luis Planas, se convertía, a través de los «canutazos» a las televisiones, en el máximo defensor de Pedro Sánchez
Con el desahogo epistolar, el secretario general de los socialistas se ha puesto en una difícil disyuntiva, pues o cumple su amenaza o confirmará sus hechuras de político tacticista, capaz de pasar por encima de todas las convenciones sociales.
La «rajada» de Laura Arroyo, coordinadora de Formación de Podemos, pidiendo la intervención de los medios y la judicatura ha sido la guinda a los últimos derroteros salidos del pacto del entorno gubernamental con Pablo Iglesias para «calmar» a los morados
El problema de esta inversión de valores en el tradicional juego político que caracterizaba a unas democracias, hoy, contaminadas del peor populismo, es que el discurso frentista se extiende a aquellos jueces que tienen la desfachatez de instruir causas incómodas para las izquierdas.
Patxi López, «un socialista vasco» –según autodefinición– y, al mismo tiempo, uno de los más mimados del Grupo Parlamentario de dicha tendencia en el Congreso, se dejó caer el pasado miércoles, tras la carta de Pedro Sánchez, con la proclama comunista del «No Pasarán»
El Gobierno se sacó de la manga una reforma legal por la que se impedía a un Consejo en funciones llevar a cabo nombramientos de jueces y magistrados, no fuera a ser que recayeran sobre profesionales de la Justicia sin suficiente «pedigrí» progresista.
Pintan bastos en la plataforma de extrema izquierda. Yolanda Díaz sigue desaparecida tras el fracaso del País Vasco
La crudísima verdad es que siete de cada diez parlamentarios de la Cámara de Vitoria defienden la ruptura con el resto de España y, por consiguiente, la destrucción de esa unidad histórica de cinco siglos.
Para el constitucionalismo, por tanto, las opciones se reducen exclusivamente al Partido Popular del candidato Javier de Andrés, que ha realizado una campaña honesta en un feudo siempre hostil
En el sector televisivo no dan crédito ante las informaciones que señalan a la presidenta eventual de TVE, Concepción Cascajosa, militante socialista acreditada, como origen de los argumentarios que intentan apuntalar –sin haber por dónde cogerlos– el fichaje de David Broncano
"Si Bildu viene actuando como el mejor escudero de Pedro Sánchez no es sólo por gratitud, sino porque su principal objetivo es la excarcelación de los terroristas presos".
Una cosa son las declaraciones en público y otras las privadas. Y es que en Vox hay quienes empiezan a estar hartos del sainete balear tras la última crisis que se ha saldado con la dimisión de dos portavoces
Desde que Pedro Sánchez llegó a La Moncloa, el número de pacientes en listas de espera quirúrgicas se ha incrementado en un 45 por ciento.
El ataque de Irán ha puesto el foco sobre los compromisos militares de España y la política de Defensa, ahondando la brecha existente en el Gobierno
No deberían los Ortuzar y compañía extrañarse de la pérdida de apoyos en una nuevas generaciones a las que se han camuflado sus referentes. Y lo mismo reza para los socialistas vascos, en una deriva que conduce a replicar el trasvase de voto hacia los independentistas, como en Galicia.
Después de la que se ha venido tras el ataque de Irán a Israel, en Exteriores esperan que al menos esto tenga un lado positivo: haber frenado la tentativa de viaje de la vicepresidenta Yolanda Díaz (cuota Sumar) a Palestina
Una vez más, la realidad se corresponde muy poco con el relato que difunden los propagandistas de La Moncloa de un liderazgo internacional encarnado por Pedro Sánchez, autoerigido en singular interlocutor entre la Unión Europea y el mundo árabe.
Los damnificados (que no son pocos) por el ministro de Exteriores, José Manuel Albares, se han encargado de subrayar la «chapuza» de la condena de España al ataque iraní contra Israel
En el ecuador de la campaña de los comicios del País Vasco, la incertidumbre por las consecuencias del resultado gana peso fundamentalmente por su impacto sobre la gobernabilidad del Estado
Que todos los partidos de la Asamblea de Madrid, incluido el socialista y Más Madrid, votaran a favor de solicitar la reapertura del Directo Madrid-Burgos, propuesta presentada por el PP, no ha caído muy bien en el Ministerio de Óscar Puente
Y no se trata de cerrar la verja como se propone desde algunos sectores políticos sino de trasladar a Gibraltar las mismas condiciones aduaneras, fronterizas y de control de tráficos financieros que impone la UE a los países terceros.
Cobra cada vez más fuerza, quién sabe si por interés de los afines, la hipótesis de que el PSOE prepara a su secretario de Organización, Santos Cerdán, para abandonar Ferraz buscándole acomodo en las listas europeas
La izquierda, que siempre ha contemplado el mercado inmobiliario como instrumento para la especulación y no concibe otra solución que no pase por el intervencionismo estatal.
Ya lo contamos por aquí: Sumar tomó nota de la encuesta negativa publicada por un medio muy cercano al Gobierno y, según parece, eso pasó factura en la sesión del pasado miércoles en el Congreso
Cabe preguntarle al presidente del Gobierno si de verdad cree que se puede impulsar un estado palestino sin las garantías de que no derivará en un califato islamista, financiado, por supuesto, con el dinero de la Unión Europea y de los Estado Unidos.
La guerra civil «indepe» continúa más viva que nunca, en particular desde que Carles Puigdemont se postulara como candidato
Estamos, pues, ante un nuevo relato oficialista que pretende disimular la inacción de la actual coalición de gobierno en el ámbito de la vivienda pública.
Últimamente, algún que otro medio progubernamental se está convirtiendo en una máquina de enviar avisos a quienes se salen de la línea dictada por La Moncloa.
Nos hallamos ante el acabado retrato de la práctica del doble rasero, que se ha convertido en seña de identidad de la izquierda española, que, al parecer, considera que los votos no tienen el mismo valor democrático si no les favorecen,
Con el presidente y la administración más opacos y obstruccionistas, no es descartable que Sánchez niegue la legitimidad del Senado para interrogarlo. Se siente por encima de la Ley.
La resaca del enfado del vicepresidente de Castilla y León por las fuentes anónimas de cierto reportaje que le dejaba a los pies de los caballos continúa.
Sánchez necesitaba los 7 votos de Junts para repetir en La Moncloa y para ese fin ha sido capaz de allanar las instituciones y desdecirse con absoluta tranquilidad.
El vicepresidente de la Junta de Castilla y León, Juan García-Gallardo, se mostró bastante escocido con un reciente reportaje sobre el futuro de Vox
Hiperliderazgo con fisuras