Internet

Desarticulan un grupo de estafadores por Internet que obtuvieron 300.000 euros

Ha sido detenido el cabecilla y siete "muleros"encargados de abrir más de 50 cuentas bancarias con documentación falsa

Agentes de la brigada de Delitos Telemáticos de la Policía
Agentes de la brigada de Delitos Telemáticos de la Policíalarazon

Engañaban a sus víctimas ofertando productos y servicios inexistentes que anunciaban en webs especializadas o en páginas que creaban simulando ser una empresa de reconocido prestigio.

Agentes de la Policía Nacional han desarticulado un grupo que estafó a más de 250 personas a través de Internet con las que obtuvieron 300.000 euros de beneficios. Los arrestados contaban con un centro de operaciones ubicado en la ciudad de Valencia desde donde se dedicaban a engañar a sus víctimas ofertando productos y servicios inexistentes en webs especializadas en la compra-venta online o en páginas ficticias que creaban simulando ser una empresa de reconocido prestigio. Ha sido detenido el cabecilla y siete muleros encargados de abrir más de 50 cuentas bancarias con documentación falsa donde realizaban los cobros de las ventas fraudulentas.

Las investigaciones se iniciaron hace algo más de un año al tener conocimiento de varias denuncias en las que se informaba que se habían abierto diferentes cuentas bancarias con documentación falsa, principalmente con cartas de identidad rumana, donde se recibían multitud de transferencias e ingresos bancarios tanto de otras entidades bancarias del territorio español, como de distintos países europeos.

Después de realizar las primeras pesquisas los agentes averiguaron que los sospechosos ofertaban productos en conocidas páginas web dedicadas a la compra-venta o en páginas que creaban previamente con el objeto de simular las webs de empresas de reconocido prestigio. De esta forma fingían vender todo tipo de objetos y servicios, que en realidad no existían o nunca enviaban -aparatos electrónicos, apartamentos en alquiler en una ciudad de Europa e incluso ofertas de trabajo como cuidador de niños en países extranjeros-.

Servicio al cliente en e-mails gratuitos

La forma de actuar de la organización era siempre la misma, subían las diferentes ofertas y servicios a páginas web auténticas o creadas por ellos mismos y, tras recibir la solicitud de compra por alguna persona interesada, se comunicaban con ella a través de correos electrónicos basados en web. Utilizaban este tipo de plataformas ya que no obligan a facilitar datos auténticos al registrarse, ni es necesario pagar por el dominio, además de esta forma podían conectarse desde locutorios o cibercafés, con conexiones WIFI gratuitas, lo que dificultaba su localización. Cerrada ya la operación de compraventa y, para dar mayor credibilidad a la misma, solicitaban la transferencia a través de una cuenta bancaria que previamente habían abierto con documentación falsa. Una vez recibidas dichas transferencias, extraían el efectivo en cajeros automáticos de distintas sucursales. Posteriormente lo sacaban de España a través de envíos gestionados por empresas de dinero rápido o directamente y en efectivo en viajes a Rumanía.

Avanzadas las investigaciones los agentes localizaron a todos los integrantes de la organización, en total ocho hombres de entre 20 y 52 años. Además averiguaron que utilizaban el domicilio del líder de la organización, como base de operaciones. Desde este lugar creaban las páginas webs ficticias y ponían los diferentes anuncios de productos y servicios, y además fabricaban y elaboraban los documentos necesarios para poder abrir las cuentas bancarias donde los "muleros"recibían las transferencias. El grupo contrató más de 50 cuentas bancarias con identidades falsas necesarias para recibir las transferencias bancarias fraudulentas.

Ocho detenidos y un registro

La operación ha culminado con el arresto de ocho personas, entre ellas el cabecilla del grupo a los que se les imputan más de 250 delitos de estafa y más de 50 de falsificación documental. También se ha realizado un registro en el domicilio usado como centro de operaciones, donde se ha incautado de todo el material necesario para llevar a cabo esta actividad: documentación, un ordenador portátil, dos impresoras, varios móviles y una tablet entre otros efectos.