Suceso

La cumbre europea en la Alhambra: un viaje histórico a la época de Carlos V

El acto ha rendido un homenaje al emperador, quien nunca tuvo la oportunidad de presenciar en persona el recorrido ceremonial concebido hace 500 años

Los Reyes de España, Felipe (7d) y Letizia (6d), reciben a los mandatarios europeos en su visita al Patio de los Leones de la Alhambra dentro de la III Cumbre de la Comunidad Política Europea (CPE), este jueves en Granada.
Los Reyes de España reciben a los mandatarios europeos en su visita al Patio de los Leones de la Alhambra dentro de la III Cumbre de la Comunidad Política Europea (CPE) en GranadaMiguel Ángel MolinaAgencia EFE

La Alhambra, un monumento cargado de historia y misterio, ha sido el escenario de la cumbre europea que ha dejado maravillados a aquellos que se dedican a la organización de eventos y que conocen la rica historia del edificio. Lo que los organizadores lograron fue una recreación precisa del recorrido ceremonial concebido hace 500 años durante el reinado de Carlos V, como bien ha informado el historiador y profesor de la Universidad Pablo Olavida de Sevilla, Adrián Yánez, en su cuenta de Twitter.

Carlos V y su esposa eligieron la Alhambra como destino para su luna de miel, un lugar que marcó el inicio de su plan para construir un palacio que se diferenciara notablemente de las construcciones islámicas de los palacios nazaríes.

El Palacio de Carlos V, diseñado como una "fachada", servía como antesala regia, un concepto que contrastaba con la concepción islámica de los palacios nazaríes. Durante la cumbre europea, este palacio cumplió su función ceremonial mientras los invitados recorrían la alfombra azul que atravesaba el patio, posando ante los medios de comunicación.

El deseo de Carlos V de conectarsu imponente palacio cuadrado con el Palacio de Comares, utilizado por los reyes de Granada como salón del Trono, se hizo realidad a través de un pasillo estrecho que los dignatarios recorrían, llevándolos desde un patio renacentista hasta el espectacular patio de Arrayanes. Y finalmente, una sorpresa aún mayor aguardaba a los invitados cuando cruzaban una puerta pequeña: los reyes Felipe y Letizia los esperaban en el patio de los Leones, un antiguo palacio privado de los sultanes.

Este evento europeo ha rendido un emotivo homenaje al emperador Carlos V, quien nunca tuvo la oportunidad de presenciar en persona este recorrido ceremonial, ya que el palacio se completó mucho después de su muerte. La Cumbre en la Alhambra se convirtió así en un vínculo entre el presente y un pasado glorioso, resaltando el legado de un emperador que desempeñó un papel fundamental en la construcción de Europa.