¿Son los libros de texto de secundaria material de adoctrinamiento?

La controversia en torno a los libros de texto que actualmente se utilizan en la Educación Secundaria Obligatoria (ESO) en España ha cobrado relevancia en este inicio de curso. Varias regiones han expresado su preocupación acerca de la presunta presencia de inexactitudes, afirmaciones polémicas y sesgos ideológicos en estos materiales educativos, a menudo inclinados hacia el progresismo.

Uno de los ejemplos señalados es el manual de Historia de España de la editorial Castells para secundaria, en el cual se describe a Vox como una formación "con un discurso ultranacionalista, xenófobo, autoritario y populista". Otros ejemplos los encontraríamos en la representación de otros partidos como Ciudadanos y Podemos. A pesar de sus notables diferencias ideológicas, se resalta que ambos partidos comparten la característica de tener líderes jóvenes y un deseo de regeneración en la vida política del país, lo que se refleja en su imagen y discurso de estilo innovador.

Además, en los libros de Biología y Geología de la editorial Vicens Vives utilizados en la Comunidad de Madrid, se promueve activamente la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas, una iniciativa respaldada por los partidos en el poder en España. La apología de esta agenda y el énfasis en la sostenibilidad se encuentran en contraste con la imparcialidad que se espera en los materiales educativos.

La controversia en torno a los libros de texto de la ESO en España se centra en la posible presencia de sesgos ideológicos y la falta de imparcialidad en los materiales educativos utilizados en las aulas. Esta discusión pone de relieve la importancia de garantizar que los libros de texto proporcionen información objetiva y fomenten el pensamiento crítico entre los estudiantes.