Macrooperación contra el tráfico de marihuana en Granada

La operación policial que ha desarrollado desde esta mañana la Policía Nacional contra el tráfico de marihuana en la zona norte de Granada ha dejado un barrio blindado por los agentes, desplegados en los principales accesos mientras se practicaban numerosas detenciones y registros. La denominada “Operación Cake” se ha llevado a cabo en colaboración con Vigilancia Aduanera y ha contado con la participación de más de doscientos agentes de distintas unidades especiales, además de las de la capital granadina, procedentes de Madrid y Málaga, ha informado este jueves a Efe fuentes policiales.

En una mañana fría de otoño y bajo amenaza de lluvia, el habitual ajetreo de la zona ha quedado alterado desde antes de las 8.00 horas con la llegada de la Policía y los medios aéreos, con la participación de un helicóptero que ha acompañado la operación. También se han sumado guías caninos y agentes de comisarías de distrito, de Policía Judicial, Vigilancia Aduanera y grupos específicos como GOES (Grupos Operativos Especiales de Seguridad), GOIT (Grupos Operativos de Intervenciones Técnicas), UIP (Unidades de Intervención Policial) y UPR (Unidades de Prevención y Reacción).

A la espera de que trasciendan cifras oficiales sobre el número concreto de detenciones y registros practicados, el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ha informado de que el Juzgado de Instrucción 4, en funciones de guardia, es el encargado de las diligencias judiciales relativas a este gran operativo.

En los principales accesos al barrio, ubicado en la zona Norte de la capital granadina, se han podido observar numerosos vehículos policiales desplegados junto a agentes, muchos de ellos con el rostro oculto y fuertemente armados y provistos de material antidisturbios como escudos protectores. Los policías han controlado cada uno de los vehículos que salían de las calles donde se estaba interviniendo y han mantenido una férrea vigilancia en el barrio: “Que no entre ni salga nadie sin ser revisado”, sentenciaba un agente.

Aunque muchos vecinos del entorno han salido de sus viviendas para presenciar esta operación, la actuación se ha desarrollado de momento con relativa normalidad, según han apuntado fuentes policiales, que han explicado que en otras actuaciones anteriores los agentes sí habían llegado a ser recibidos incluso a pedradas.

Según la Policía, se trata de una de las operaciones más importantes de las desarrolladas contra el cultivo y el tráfico de marihuana en esta zona de la capital granadina, un barrio que se ha visto afectado desde hace años por esta actividad ilícita. Este cultivo masivo de cannabis va aparejado en la mayoría de ocasiones a enganches ilegales a la red eléctrica para sustentar la infraestructura de las plantaciones interiores, lo que también desde hace años ha provocado recurrentes apagones en este entorno.

Tantas las administraciones públicas como la empresa suministradora intentan paliar esta situación, que recientemente ha llegado a ser considerada por el Defensor del Pueblo Andaluz, Jesús Maeztu, como un “grave problema de emergencia social” que requerirá de una actuación integral y continuada en el tiempo. La propia Fiscalía Superior de la comunidad ha recogido en algunas de sus memorias anuales que Granada ocupa el triste récord de ser la mayor productora nacional de marihuana y que los amplios beneficios que mueve esta actividad podrían provocar incluso un “efecto llamada” a otras organizaciones que pretendieran participar en un lucrativo negocio o fomentar otras actividades violentas.