Sucesos

La investigación del tiroteo del barrio de Pescadería apunta deudas y desavenencias por peleas de gallos

Uno de los siete impactos de bala que había sobre la puerta de entrada de la víctima, de 21 años, la atravesó y acabó con su vida

La investigación policial en relación al tiroteo que el pasado martes acabó con la vida de un joven de 21 años de edad en el barrio de Pescadería-La Chanca y que dio lugar a la detención de tres personas y el ingreso en prisión de J.M.C., de 22 años, apunta a un ajuste de cuentas por unas deudas económicas y desavenencias al organizar peleas ilegales de gallos.

Así lo ha indicado la Comisaría en una nota, en la que detalla la actuación efectuada el pasado día 4 tras el suceso, que se produjo sobre las 13:00 horas en las inmediaciones de la calle Valdivia al iniciarse una reyerta entre numerosas personas en la zona. Fue tras esta pelea cuando uno de los implicados huyó a refugiarse a su domicilio, donde fue abatido a tiros a través de la puerta de la vivienda.

Las primera indagaciones permitieron localizar el cadáver de un joven de 21 años en el interior del número 8 de la calle Resaca, concretamente en el salón de la vivienda en posición de cubito supino y con un único orificio de entrada de bala a la altura del pecho que le ocasionó la muerte.

En el interior de la vivienda, que mostraba unas características peculiares y conocida en la barriada por la venta de sustancias estupefacientes, no se encontró ningún otro rastro de sangre ni signos de violencia, ya que según la investigación, los disparos se habrían efectuado desde fuera de la casa.

Siete disparos

En esta línea, en el exterior se localizaron numerosas vainas percutidas y dos cartuchos sin percutir del calibre nueve milímetros corto. Por parte de los especialistas de la Policía Científica y Homicidios, se pudo determinar que todos los disparos efectuados se realizaron desde la calle, de modo que uno de los siete impactos que había sobre la puerta de entrada consiguió atravesarla. También se localizó un orificio de bala en una ventana del mismo domicilio.

Tras la llegada de diversas patrullas de la Policía Nacional y acordonar toda la barriada, se localizó a un hombre con una herida en una pierna -rotura de rótula- en la calle Resaca y a otro con herida en la cabeza en la calle Maromeros.

Ambos fueron trasladados al Hospital Universitario Torrecárdenas, donde quedaron custodiados por agentes de la Policía hasta su posterior asistencia médica y traslado a la Comisaría, donde quedaron detenidos.

Con estas primeras actuaciones, una dotación policial se desplazó al número 35 de la calle Ruano, donde detuvieron a un joven de 22 años como presunto autor de los disparos en plena calle. tras autorizar el acceso a la vivienda, ya en el interior de la misma los agentes intervinieron el arma homicida que previamente había sido ocultada, tratándose de una pistola de color plateado del calibre 380 auto nueve milítros corto, tres cajas de munición de diferentes calibres y diversos cartuchos, además de una placa de hachís.

Tras barajar diversas hipótesis por parte de los investigadores en relación al móvil que habría propiciado la reyerta y posterior asesinato, se pudo saber que había sido originado por "desavenencias en unas deudas económicas" de "trapicheos" de droga y unas supuestas "peleas ilegales de gallos" que llevó a los implicados y detenidos a unos ajustes de cuentas.

Además de la detención del presunto homicida, a quien también se acusa de tenencia ilícita de armas y tráfico de drogas, se procedió a arrestar a J.C.M., de 22 años, y a F.P.D.A., de 47 años, quienes quedarón en liberta con cargos por parte del Juzgado de Instrucción número 2 de Almería por un delito de lesiones.

La Policía mantiene la vigilancia en la zona tras las fuertes tensiones que se mantienen en el barrio tras la detención y que llevaron el pasado jueves al incendio de la vivienda del supuesto autor de los disparos después de que durante la madrugada se arrojara contra ella un cóctel molotov.