Ayuntamientos

Javier Aureliano García: «Sánchez quiere pagar su programa propagandístico con nuestros ahorros»

El presidente de la Diputación de Almería critica el acuerdo de la FEMP que permite al Gobierno quedarse con los ahorros de los ayuntamientos y diputaciones, un "atraco" al municipalismo

El presidente de la Diputación de Almería y candidato a presidir el PP almeriense, Javier Aureliano García
El presidente de la Diputación de Almería y candidato a presidir el PP almeriense, Javier Aureliano GarcíaLa RazónLa Razón

Revuelta municipal en pleno mes de agosto. El acuerdo de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) que permite al Gobierno central quedarse con los ahorros de los ayuntamientos y diputaciones está levantando ampollas. El presidente de la Diputación de Almería, Javier Aureliano García, rechaza la medida y la califica de «atraco».

¿Cuáles son las razones en las que basa su oposición?

Es un atentado contra la autonomía local. Es una expropiación de los ahorros de los ayuntamientos y las diputaciones, ahorros que pertenecen a los ciudadanos, a los almerienses. Es un atraco y evidencia la nula sensibilidad del PSOE con el municipalismo y el mundo rural.

¿Cuál es el superávit de la Diputación de Almería? ¿Qué implicaría no contar con estos fondos?

Gracias a la buena gestión, y especialmente al esfuerzo de todos los almerienses, supera los 18 millones de euros. No contar con estos fondos supondría dejar de invertir en infraestructuras claves, en ayudas a los autónomos y a los que más lo necesitan, en mejorar los servicios, en crear oportunidades en los pueblos más pequeños y en ser un dique de contención contra el coronavirus.

Esta exigencia se produce en plena pandemia y se dirige a unas administraciones que están al lado de los que sufren las consecuencias de la crisis sanitaria.

Es lamentable que el Gobierno chantajee a los ayuntamientos que ahorran por su buena gestión y se les prive de dichos fondos para poder atender las necesidades de sus vecinos para que Pedro Sánchez pueda ejecutar su agenda política. Sin olvidar el agravio comparativo que supone con aquellas entidades locales que tengan deuda o un RTGG negativo. Los ayuntamientos son la primera puerta a la que llaman los españoles. Estamos ante una confiscación disfrazada de préstamo.

¿Plantea alguna medida de protesta? ¿Se puede negar la Diputación a realizar esta transferencia?

Todos los ayuntamientos y diputaciones gestionadas por el PP vamos a presentar mociones para reprobar al presidente de la FEMP y mostrar nuestro rechazo a este robo y promoveremos un recurso de inconstitucionalidad. La Diputación de Almería no va a dar ni un solo euro de los almerienses. El acuerdo es voluntario, pero deja entrever que las administraciones que no participen podrán tener problemas a la hora de acceder a otros fondos o inversiones. Eso es chantaje y extorsión.

El Gobierno, como contrapartida, se compromete a abrir un fondo de 5.000 millones para los ayuntamientos en los próximos Presupuestos Generales del Estado y otro de 300 millones para compensar las pérdidas municipales en los transportes urbanos por la pandemia. ¿Le parece suficiente?

Es un despropósito, una gran tomadura de pelo, uno de los mayores ataques que ha sufrido nuestra democracia en toda su historia. Esos 5.000 millones pertenecen al dinero que el Gobierno quiere expropiar. Para que todos lo entendamos, es como si yo te pido prestados 100 euros y de esos 100 te doy 20, pero te digo en qué te los tienes que gastar. Si no accedes, pues a lo mejor no te dejo que te gastes ni un euro de tu dinero y puede que los Fondos Europeos y otras inversiones no te lleguen. Pedro Sánchez quiere pagar su programa propagandístico con nuestros ahorros. Y los 300 millones para compensar las pérdidas en los transportes también saldrían del dinero confiscado.

¿Queda en entredicho la labor de la FEMP por este asunto?

Con esta votación y el empeño del Gobierno de realizarla a toda costa se rompe por primera vez el consenso existente en la institución que representa a los 8.000 ayuntamientos, diputaciones, cabildos y consells insulares.

El rechazo del PP ha sido unánime, una reacción que comparten otros partidos. Tras la crisis de 2008 que afectó gravemente a la financiación local. ¿Esta medida supone un nuevo golpe?

Por supuesto, y en el momento más sensible desde el punto de vista sanitario, social y económico que tal vez nos toque vivir a lo largo de nuestra vida. La gestión del Gobierno está siendo pésima desde todas las perspectivas y este asunto culmina un conjunto de despropósitos que no se merecen los españoles.

¿Qué balance hace del desarrollo del Plan Almería? ¿Cuáles son las primeras acciones que se están desarrollando?

Muy positivo. La inversión de 111 millones tiene el objetivo principal de que ningún almeriense se quede atrás por la crisis del coronavirus. Se está atendiendo a las personas y familias más vulnerables.