Tributos

La recaudación del impuesto de sucesiones baja en Andalucía un 19,5% durante la legislatura

El tributo ha seguido una trayectoria descendente desde 2018, aunque en el último ejercicio cerrado ha vivido un pequeño repunte

Una oficina de la Agencia Tributaria
Una oficina de la Agencia TributariaJUNTA DE ANDALUCÍAJUNTA DE ANDALUCÍA

La estadística del Impuesto de Sucesiones y Donaciones de la legislatura revela que se recauda menos que en 2018 y se declara más por las dos modalidades del tributo: la recaudación ha descendido un 19,5% mientras que las autoliquidaciones han crecido un 35%. De hecho, 2021, en esa comparativa entre legislaturas, ha sido un año récord en la presentación de autoliquidaciones por los ciudadanos por cuanto las 429.352 presentadas son un 35% más que las 317.653 declaraciones de 2018.

En diciembre de 2018, último mes de gestión de un gobierno del PSOE en la Junta de Andalucía, la recaudación acumulada por las dos modalidades del impuesto sumó 209,31 millones de euros con las 317.653 autoliquidaciones ya mencionadas. En diciembre de 2017 la recaudación de Sucesiones y Donaciones fue de 245 millones con 287.732 autoliquidaciones. Los datos de diciembre de 2021 señalan una recaudación acumulada de 168,47 millones y la presentación en la Administración tributaria de 429.352 autoliquidaciones, según los datos de la Agencia Tributaria de Andalucía, consultados por Europa Press.

Las últimas cifras de Sucesiones y Donaciones, publicadas por la Consejería de Hacienda y Financiación Europea, provisionales de marzo de este año, indican un descenso de la recaudación mensual de un 44,5% tras contabilizar 22,3 millones en ingresos, mientras que la acumulada en el trimestre es de 69,13 millones, un 1,9% más. El Impuesto de Sucesiones y Donaciones transciende su significación en la cesta tributaria para erigirse en el emblema de la batalla política e ideológica por mostrar un modelo fiscal diferenciado al de los oponentes.

Sucesiones y Donaciones ha representado con sus 69,13 millones el 1,6% de los ingresos tributarios de la Junta de Andalucía, que han sido en el trimestre de 4.209,97 millones, según los datos acumulados en marzo de este año. El impuesto ha seguido una trayectoria descendente desde 2018, aunque en el último ejercicio cerrado ha vivido un pequeño repunte. La evolución anual de la recaudación del impuesto en Andalucía ha sido de 209,31 millones en 2018, de 177,38 millones en 2019, de 136,53 millones y de 168,47 millones en 2021.

En el caso de las autoliquidaciones la tendencia de la legislatura ha sido la inversa por cuanto las declaraciones presentadas han sido todos los años superiores al ejercicio de la comparación, 2018, donde hubo 317.653 autoliquidaciones, para pasar a las 339.411 de 2019, las 332.162 de 2020 y las 429.352 del pasado año. Sevilla y Málaga son las dos provincias con mayor capacidad recaudatoria en Sucesiones y Donaciones. En 2018 ingresaron 52,80 millones y 42,27 millones, respectivamente, entre ambas el 45,4% del total, mientras que en 2021 han sumado 40,57 y 38,91 millones, el 47,1% del total.

En la X Legislatura, por las exigencias de Ciudadanos para garantizar su apoyo parlamentario al gobierno socialista de Susana Díaz, se produjo la primera reforma de calado en la estructura del Impuesto de Sucesiones y Donaciones a través del Decreto Legislativo 1/2018, de 19 de junio, rubricado por Susana Díaz como presidenta de la Junta de Andalucía y por el consejero de Economía, Antonio Ramírez de Arellano.

Se introdujo una reducción en la base imponible del impuesto de manera que quedaban exentos de tributar las herencias de hasta un millón de euros siempre que el patrimonio preexistente de los herederos fuera inferior a esa cifra, de manera que la liquidación del impuesto se hacía sobre el exceso a partir de ese primer millón exento.

El primer paso que dio el Gobierno de coalición de PP y Cs fue en 2019 con el Decreto-ley 1/2019, de 9 de abril, que modificó a su vez el Decreto Legislativo 1/2018, última referencia normativa de los gobiernos socialistas. El gobierno de Juanma Moreno introdujo la bonificación del 99% de la cuota tributaria tanto para las transmisiones mortis causa como para inter vivos.

En la exposición de motivos del decreto-ley se argumentó que la bonificación en la cuota tributaria se compatibilizaba con “las reducciones autonómicas sobre el impuesto actualmente vigentes, en concreto la reducción de 1.000.000 de euros sobre la base imponible, con la finalidad de no perjudicar a las adquisiciones por herencias de hasta dicho importe, ya que de otro modo tendrían que pasar de no tributar a hacerlo por el 1%”.