
Minería
La provincia andaluza que cuenta con «hasta siete de los minerales críticos» más codiciados en el mundo
El hallazgo de tierras raras renueva el interés por un enclave con 249 localizaciones de materiales

Almería posee varios indicadores de tierras raras y «hasta siete de los minerales críticos» más codiciados por la minería del futuro, entre las 249 ubicaciones de yacimientos que señala en la provincia el primer mapa de este tipo realizado por el Instituto Geológico y Minero de España (IGME), en colaboración con la Junta de Andalucía.
Se trata de materiales «indispensables» porque «la escasez de ellos impacta en la economía europea», como destacó la directora del IGME en Granada, Concha Fernández Leyva, responsable de este atlas con el que «ponemos la base para planificar una exploración más detallada de los recursos reales que tenemos y su potencial» en nuestra tierra.
En este sentido, «muchos de esos puntos son antiguas minas que se abandonaron, bien porque se agotaron, bien porque era más barato traer los recursos de otros sitios, o tal vez porque las reservas ya nos estaban cuidadas por quienes las explotaban», explicó Fernández Leyva, aclarando que «habría que hacer un estudio más detallado por parte de las empresas mineras para analizar qué porcentaje de material contiene aún cada indicación y si sería rentable o no ponerlas en funcionamiento otra vez».
De esta forma, «lo que hacemos es representar lo que hay ahora mismo sobre la geología andaluza, dotar de una imagen rápida que localiza qué tipos de sustancias tenemos en Andalucía, dónde y por qué lo sabemos», incidió la responsable del «mapa hecho a escala 1:400.000 de la región» y en el que Almería alberga sustancias como «cobalto, antimonio, plomo y zinc, que a su vez pueden contener germanio e indio, que sí son elementos críticos». Si bien la provincia de Córdoba estaría por delante del resto en cuanto al número total de yacimientos conocidos, elementos como la barita o la fluorita también registrados en tierras almerienses disparan el interés minero, «porque tienen una demanda en aumento en industrias como la farmacéutica, los aerogeneradores o la construcción de baterías o microchips», como aseguró la directora del IGME en Granada, invitando a que «empresas interesadas en la explotación estudien si es factible su reapertura o puesta en marcha, en un momento en el que se hace vital para Europa no depender de países terceros para la obtención de los recursos esenciales».
Mientras vemos como se convierten en objeto de codicia y potencial estratégico de las naciones, que negocian su control, en Almería las tierras raras, término que comprende diecisiete elementos indispensables para la fabricación de imanes permanentes de alta potencia utilizados en una amplia gama de aplicaciones, desde motores eléctricos hasta equipos médicos; se han detectado en los yacimientos aluvionares del complejo volcánico de El Hoyazo, en Níjar. Además, se han identificado indicios de litio en la zona de El Arteal, en Sierra Almagrera, que se sumarían también a las numerosas marcas de antimonio, titanio y cobalto repartidas por decenas de galerías abandonadas a lo largo y ancho de la provincia almeriense durante siglos.
Sin embargo, aunque «los indicios dicen que las minas se cerraron porque dejaron de ser rentables, hoy hay nuevas tecnologías para la extracción e interesan unos materiales muy distintos, incluso a veces descartados en el pasado», consideró Mercedes Cobrero, jefa del servicio de Industria y Minas de la delegación de la Junta de Andalucía en Almería, apuntando como «algunos en la actualidad resultan extremadamente útiles y valiosos». Así, «ojeando el mapa, lo que nos dice es que tenemos grandes posibilidades de prospección, pero son las empresas las que tienen que evaluar el coste de extracción y de venta», puntualizó la ingeniera, sorprendida por «la existencia de litio solo aquí de toda Andalucía» y ante «su importancia como conductor de calor y para componer baterías eléctricas» .
De hecho, «una planta de producción de litio aquí en Almería sería muy interesante para la economía local», apreció Cobrero, convencida de que «este mapa es una buena pista para que el sector privado empiece a investigar sobre ello». Además, «si el terreno es protegido no se podrá explotar», indicó Concha Fernández Leyva, recordando que, «por supuesto, los temas ambientales no se pueden traspasar» y que «los permisos nunca se concederán si el impacto medioambiental es grande o la zona está especialmente protegida». Descartado quedaría, por ejemplo, el Parque Geológico del Barranco del Jaroso de Cuevas de Almanzora, así como cualquier espacio con consideración de reserva o protegido. «Habría que buscar entonces en otros sitios, porque hay mucho donde trabajar y muy desconocido».
✕
Accede a tu cuenta para comentar