Operación de la Policía Nacional
Cae una red criminal de origen serbio que asaltó la vivienda de un clan rival en Málaga
Se han practicado siete entradas y registros, cinco de ellas en Estepona, una en Madrid y otra en Vilassar de Dalt (Barcelona)
La Policía Nacional ha desarticulado una organización criminal de origen serbio que asaltó la vivienda de un clan rival en Estepona (Málaga), una operación en la que han sido detenidas once personas, de las que nueve han ingresado en prisión, entre ellos el líder, sobre el que pesaba una orden de detención emitida por Serbia.
Los arrestos se han llevado a cabo en las provincias de Málaga, Madrid y Barcelona por su presunta implicación en los delitos de detención ilegal, robo con violencia, tenencia ilícita de armas, lesiones, falsedad documental, tráfico de drogas y pertenencia a organización criminal.
En la operación han sido intervenidas tres armas de fuego -algunas con el número de serie borrado-, más de cien cartuchos de munición, siete documentos de identidad falsos, un dron, 16.000 euros en efectivo y una bolsa con utensilios que los agentes creen que iban a ser utilizados en otro ataque.
Se han practicado siete entradas y registros, cinco de ellas en Estepona, una en Madrid y otra en Vilassar de Dalt (Barcelona).
Entre los detenidos está el líder de la organización, al que le consta una orden internacional de detención emitida por Serbia, de donde se fugó en 2021 y era una de las personas más buscadas de dicho país.
Cinco asistidos en un hospital
La investigación se inició el pasado enero cuando los agentes tuvieron conocimiento de la asistencia sanitaria en un hospital malagueño por lesiones graves a cinco ciudadanos serbios, averiguaron que la vivienda donde residían había sido asaltada con armas de fuego y que los moradores habían sido maniatados con bridas, golpeados y heridos.
Dada la gravedad de los hechos y la poca colaboración que mostraron estas personas, se pudo constatar, con la colaboración de las autoridades serbias, que los autores podrían tratarse de peligrosos delincuentes relacionados con el crimen.
Los investigadores sospecharon que este asalto podría venir motivado por un ajuste de cuentas entre clanes serbios y, tras la inspección ocular de la vivienda donde ocurrieron los hechos, se constató el asalto y su gravedad al hallar abundantes restos sanguíneos por todo el inmueble y restos de bridas.
Se intervino una pistola con el número de serie borrado, que los autores de los hechos habrían dejado en las inmediaciones del lugar del asalto durante su huida.
Tácticas militares
Se averiguó que el asalto había contado con una minuciosa preparación previa y una ejecución de los hechos que recordaba a tácticas militares, contando incluso con el apoyo del dron para preparar la acción y tener vigiladas a las víctimas.
Participaron ocho personas, cinco asaltando la casa y tres en labores de vigilancia en las inmediaciones.
Se detectó la amplia logística empleada en la planificación, llegaron a alquilar hasta tres vehículos y tres viviendas donde se alojaron los días previos mientras preparaban el ataque.
Los autores contaban con infraestructura en las provincias de Málaga, Madrid, Barcelona y Alicante.
Una vez identificados todos, con la permanente colaboración del Servicio de Lucha contra el Crimen Organizado de la República de Serbia, se determinó que el organizador del ataque era líder de una peligrosa organización criminal de carácter armado, vinculada al narcotráfico, y que contaba con una orden para detenerlo.
Tras tener constancia de que la organización se habría desplazado nuevamente a la provincia de Málaga, se organizó un operativo policial para arrestar a los implicados con la participación de agentes del Grupo Especial de Operaciones y del Grupo Operativo Especial de Seguridad, ante la peligrosidad de los investigados.
Sobre otro de los arrestados también pesaba una orden internacional de detención emitida por Serbia y a otro le constaba una orden de ingreso en prisión de España
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