Medicamentos

Expertos avisan de que más del 54% de los pacientes españoles está mal anticoagulado con 'Sintrom'

IV Edición del ciclo de jornadas 'Espacio Ictus' con el título '2019: Situación actual de la anticoagulación en España'

Más del 54 por ciento de los pacientes españoles está mal anticoagulado con 'Sintrom', según han puesto de manifiesto expertos en Medicina de Familia, Neurología, Cardiología, sociedades científicas y colectivos de pacientes durante la IV Edición del ciclo de jornadas 'Espacio Ictus' con el título '2019: Situación actual de la anticoagulación en España'.

El encuentro ha contado con el aval de la Sociedad Española de Neurología (SEN) y el apoyo del Grupo de Estudio de Enfermedades Cerebrovasculares de la SEN, así como con la colaboración de Bayer, Boehringer Ingelheim, Daiichi Sankyo y la alianza Brystol Myers Squibb-Pfizer.

Y es que, aunque ha habido un progreso espectacular en el mundo de la anticoagulación debido a la aparición de los anticoagulantes de acción directa (ACOD), los pacientes deben depender de un visado para su libre prescripción, lo que supone una "barrera"a la calidad de vida de los pacientes. "Los pacientes reivindicamos que se ponga por delante los avances y el progreso", ha dicho el presidente de la Alianza General de Pacientes (AGP) la Asociación Madrileña de Pacientes Anticoagulados y Cardiovasculares (AMAC) y vocal de FEASAN, Juan Manuel Ortíz.

Además, según se ha comentado en el encuentro, desde el punto de vista de la medicina general, también es mucho el trabajo que habría que desarrollar en materia del ictus, por lo que una de las soluciones pasa por que estos médicos puedan disponer de más tiempo por paciente para poder gestionar una prevención primaria eficaz, y poder controlar los factores de riesgo que pueden llevar a un paciente a desarrollar un ictus.

"Debemos ejercer un rol de integradores y eje del sistema, integramos al paciente en una visión social, laboral y clínica. Asimismo, la Administración debería ser valiente y tomar medidas para que la medicina de familia tenga la importancia que debe tener dentro del Sistema Nacional de Salud para poder disminuir el gran porcentaje pacientes mal anticoagulados", ha dicho el médico especialista en Medicina Familiar y Comunitaria, Coordinador nacional del Grupo de Trabajo de Neurología de SEMERGEN, Pablo Baz.

Por su parte, la cardióloga clínica del Servicio de Cardiología del Hospital Universitario La Paz y Coordinadora del Grupo de Trombosis Cardiovascular de la Sociedad Española de Cardiología (SEC), Inmaculada Roldán, ha avisado de que la fibrilación auricular (FA) debería ser considerada "un problema de estado"ya que representa uno de los principales factores de riesgo de ictus con mayor riesgo de discapacidad y mortalidad. Según la experta, en España se anticoagula incorrectamente y en contra de las guías de práctica clínica del resto de Europa.

"En España más del 54 por ciento de los pacientes españoles están mal anticoagulados con el 'Sintrom' y tienen un pobre margen terapéutico, al no recibir los anticoagulantes directos. Para mejorar esta barrera se han hecho diversos estudios ¿por qué la frenamos ahora, cuando tenemos en nuestras manos una mejor forma de tratar a los pacientes?. Cuando se encuentra a un paciente sistemáticamente con el INR fuera de rango se debe cambiar a los ACOD. El paciente que no está bien anticoagulado se muere más", ha apostillado Roldán.

Asimismo, el neurólogo coordinador de la Unidad de Ictus del Hospital Clínico San Carlos y representante de la Sociedad Española de Neurología (SEN), José Egido, ha destacado la importancia de tener en cuenta el número de personas que tiene riesgo de tener una embolia potencialmente devastadora, ya que 1 de cada 5 ictus es producido por FA.

"En cuanto al acceso y equidad de los ACOD en España, los argumentos economicistas para no prescribir estos fármacos en España han quedado sin efecto y así lo avalan diferentes estudios. Todas las sociedades científicas internacionales recomiendan el uso de ACOD sobre el 'Sintrom', recomendaciones que se llevan a acabo en el Reino Unido con magníficos resultados", ha añadido.

Respecto al nivel de penetración e innovación terapéutica en España, el jefe de Servicio de Neurología del Hospital Universitario de Guadalajara y miembro de la SEN, Antonio Yusta, ha recordado que evitar la enfermedad cerebrovascular es más barato que tenerla. "Es decir, que por cada euro en inversión se ganaría unos 100 euros en evitar problemas, ya no solamente humanos, si no costes sanitarios directos. La lucha debe pasar por abolir el visado, el médico que se hace responsable de un paciente se debe hacer responsable de su tratamiento y seguimiento, debe tener las manos libres para poder tratarlo según su criterio. El problema no es científico es puramente económico", ha añadido.

Por su lado, el jefe de Sección de la Unidad de Arritmias del Hospital Puerta de Hierro, Ignacio Fernández Lozano, ha señalado que el visado no es una barrera en la prescripción, sino que "es una barrera en la financiación". Además, prosigue, la adherencia al tratamiento es fundamental que la asuman tanto el paciente como el profesional sanitario.

"No solo hay inequidades en el acceso a la innovación terapéutica por comunidades autónomas, también existen inequidades por áreas de Madrid. Hay muchos profesionales que se han rendido en la prescripción de estos fármacos por no luchar con la inspección y eso es algo que debemos de revertir, ya que con el mismo Informe de Posicionamiento Terapéutico tenemos diferencias de 30 puntos porcentuales en España", ha argumentado.

En este sentido, el presidente de Freno al Ictus, Julio Agredano se, ha informado de que España está en el "vagón de cola"en cuanto a nivel de penetración de los ACOD en relación a otros países Europeos. "Estamos en un país en dónde cada comunidad sigue unas pautas e intereses diferenciados, por ejemplo, Cantabria que es la única comunidad que no tiene visado para estos medicamentos, cuenta con casi un 60 por ciento de penetración entrando en la media Europea, contrastando con otras comunidades como Asturias, Galicia y Madrid en torno al 27 por ciento una diferencia muy grande de entorno a 15 puntos porcentuales entre una comunidad y otra", ha zanjado.