Salud

La triple terapia mejora los brotes agudos de la EPOC

La Razón
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Una de las consecuencias derivadas del tabaquismo es la EPOC –acrónimo de enfermedad pulmonar obstructiva crónica– una patología respiratoria caracterizada por una reducción persistente del flujo de aire y cuya principal causa es, precisamente, la exposición al humo del tabaco, ya sea de forma activa o pasiva.

Aunque tiene una evolución lenta, a medida que empeora los esfuerzos del día a día, como subir unos cuantos escalones o incluso las actividades cotidianas, pueden hacerse muy difíciles. Sus síntomas más frecuentes son la disnea (dificultad para respirar), la tos crónica y la expectoración (con mucosidad).

Los pacientes, además, sufren frecuentes exacerbaciones (es decir, episodios más intensos de disnea, tos y expectoración), que pueden durar de días a semanas. Estos episodios pueden ser muy incapacitantes, requieren atención médica de urgencia (incluso hospitalización) y, en ocasiones, pueden ser mortales.

La buena noticia es que un estudio –el Tribute– acaba de demostrar la superioridad de la llamada triple terapia (Trimbow, comercializado por Chiesi, que contiene tres principios activos y se administra mediante el uso de un único inhalador presurizado de dosis media) en la reducción de estas exacerbaciones moderadas y graves en pacientes con EPOC. El trabajo, de 52 semanas de duración y con 1.532 pacientes, ha comparado la triple terapia –un corticoesteroide inhalado (ICS) y dos broncodilatadores (LABA y LAMA)– frente a la combinación fija de LABA/LAMA, tal y como aseguró Dave Singh, profesor de Farmacología Clínica y Medicina Respiratoria de la Universidad de Manchester (Reino Unido) durante el Congreso Europeo de Respiratorio.

Además de los buenos resultados obtenidos en este estudio (cuyos datos definitivos aún no se han hecho públicos) en el tratamiento de las exacerbaciones, Singh destacó la importancia de simplificar el tratamiento pues «se ha visto que muchos pacientes no son capaces de hacerlo correctamente», aseguró. Algo de vital importancia si se tiene en cuenta que, además, se trata de una enfermedad crónica. Así lo ponen de manifiesto los resultados de la encuesta «EPOC: conciencia, experiencia e impacto en la calidad de vida», realizada a un total de 4.250 personas de cinco países (España, Italia, Alemania, Reino Unido y Bélgica) y presentada en el marco del congreso.

Y es que el 24% de los encuestados españoles reconoce que olvida tomarlo, y hasta el 32% respondió no saber que se trataba de un tratamiento continuado. De hecho «el 85% de los pacientes españoles preferiría usar un sólo dispositivo para tratar su enfermedad, y hasta el 72% aseguró que seguiría mejor el tratamiento si tuviera un fármaco que pudiera tomar con menos frecuencia», señaló Isabella Cecchini, responsable del departamento de investigación en salud de la consultora GFK, que llevó a cabo la encuesta.