Empresas

La desescalada permite recuperar casi un millar de empresas a Castilla y León en mayo

El presidente de la patronal, Santiago Aparicio, denuncia que “la inyección de liquidez ha sido muy escasa cuando necesitábamos dinero contante y sonante”

Un comercio de Burgos anuncia su cierre
Un comercio de Burgos anuncia su cierreRicardo OrdóñezIcal

La desescalada progresiva de la Comunidad y el lento retorno de la economía al dinamismo tras la hibernación por el estado de alarma permitió una cierta recuperación del tejido productivo de la Comunidad en mayo, respecto al mes anterior, aunque los datos en la comparación con la normalidad del 2019 siguen siendo “catastróficos”.

Las cifras recogidas por Ical del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones revelan que la Comunidad registró en mayo 65.505 empresas cotizantes a la Seguridad Social, lo que supone un crecimiento respecto a abril en 958 actividades. Sin embargo, el dato representa un desplome en 3.923 empresas en relación al mismo mes del año anterior, con una caída porcentual del 5,7 por ciento.

En la comparativa mensual, Castilla y León anotó 372 nuevas empresas en la construcción y 357 en los servicios, hasta un total de 6.900 y 45.882, respectivamente. Asimismo, se pusieron en marcha 205 en el sector primario y 24 industrias, con 6.073 y 6.650 en total para cada sector. El dato cambia radicalmente en la comparativa anual, ya que desaparecieron 3.192 empresas del terciario; 665 de la construcción; y 175 industrias. El sector primario, esencial durante el estado de alarta, ganó 109 actividades respecto al año anteriot.

En cuanto al empleo, las empresas cotizantes daban trabajo en mayo a 622.264 asalariados, 5.727 más que en abril. El empleo se impulsó sobre todo en el sector primario, que sumó 3.024 puestos; y en la construcción, que generó 1.557, junto a 884 en los servicios, y 302 en la industria.

La comparativa anual revela el verdadero alcance de la crisis, ya que se perdieron respecto a mayo de 2019 un total de 26.294 puestos de trabajo, la mayor parte en el sector servicios, donde desaparecieron 20.667. Asimismo, la construcción también redujo sus empleos en 3.264 puestos, y la industria, en 2.611. El agro siguió en alza, y creó respecto al año pasado 248 puestos de trabajo.

Enorme preocupación

El presidente de la Confederación de Organizaciones Empresariales de Castilla y León (Cecale), Santiago Aparicio, expresó a Ical su “enorme preocupación, porque 4.000 empresa han caído” y lamentó que sus previsiones de que entre el 20 y el 25 por ciento de los establecimientos de comercio y hostelería “no iban a levantar sus persianas se están cumpliendo”.

Aparicio recordó que llevan tiempo pidiendo una inyección de liquidez a las empresas para sobrevivir equivalente a la facturación que hubieran tenido durante los 90 días que han permanecido cerradas por fuerza mayor, algo que “no ha sido así”. “Eso hubiese sido lo ideal y hubiera permitido salir airosas a un porcentaje altísimo de empresas”, dijo, para reprochar que “la inyección ha sido muy escasa por parte de las administraciones, cuando necesitábamos dinero contante y sonante”.

Asimismo, denunció que las medidas para el retraso del pago de impuestos o alquileres, “han ido muy lentas” y “no ha sido lo que esperábamos en una situación inédita y grave para las empresas, los que movemos la economía”, comentó.

El dirigente patronal evidenció que “hace falta dinero metido en vena” y, con todo, asumió que “todavía se puede poner remedio” a la situación, aunque, a su juicio, “nadie, sobre todo a nivel nacional, ha creído en las empresas”. “Se están empezando a romper las cadenas de pago a proveedores y ahí es cuando empiezan a caer las empresas”, dijo, par exigir dinero y si las administraciones “no tiene para salvaguardar a las empresas, que se endeuden", concluyó.