Sucesos

Solicitan 12 años de cárcel por una violación tras un fin de semana de drogas en Zamora

El acusado niega los hechos y asegura que mantuvieron relaciones sexuales de forma consentida

Audiencia Provincial de Zamora
Audiencia Provincial de ZamoralarazonLa Razón

La Fiscalía y la acusación particular han pedido doce años de prisión para un hombre, como supuesto autor de una agresión sexual a una mujer un domingo por la noche después de que ambos compartieran un fin de semana de consumo de drogas en Zamora con amigos comunes.

El hombre, que se ha sentado este miércoles en el banquillo de los acusados de la Audiencia Provincial de Zamora, ha negado la violación y ha sostenido que mantuvieron relaciones sexuales de forma consentida en un lugar distinto al que la mujer sitúa la presunta agresión sexual.

La defensa ha solicitado su libre absolución mientras que Ministerio Fiscal y acusación particular han solicitado, además de la pena de cárcel, siete años de alejamiento una vez cumplida la penas de prisión y una indemnización de 12.000 euros, informa Efe.

La víctima tardó cuatro días en denunciar lo ocurrido ante la policía y lo hizo después de que comentara lo que le había pasado a otros amigos en un establecimiento comercial al que acudían habitualmente y le recomendasen que lo denunciara.

Tras acudir a una Comisaría para interponer la denuncia, la mujer se sometió a una inspección médica en la que le apreciaron hematomas en el cuerpo. La víctima ha asegurado en el juicio que esas lesiones se las había causado el presunto agresor sexual al golpearla con su bolso y y darle puñetazos en el pecho, el tórax y la espalda para que accediera a sus pretensiones.

Sin embargo, el hombre ha atribuido esas lesiones a una agresión que le causó otra mujer presente en la chabola en la que ambos pasaron el fin de semana y consumieron alcohol, hachís y speed.

El domingo por la tarde, acusado y víctima salieron de la chabola, se fueron a dar una vuelta y, al anochecer, según la mujer, la llevó a una casa semiabandonada donde, bajo amenazas y golpes, la poseyó en dos ocasiones antes de que le convenciera para irse a dar una vuelta y luego ella se escabullera para regresar a su casa.

Sin embargo, el acusado ha sostenido que tras dar un paseo mantuvieron relaciones sexuales consentidas bajo un puente en el bosque de Valorio y luego se fueron a dar un paseo, y ha negado que accedieran a la vivienda en la que la víctima declaró que se había producido la violación.

Entre las declaraciones de testigos se ha incluido la del policía que atendió a la víctima cuando se presentó en comisaría, que ha admitido que el relato de la mujer era “un poco incoherente”.