Sanidad
Más de 40 sanitarios piden en una carta que se respete la presunción de inocencia del traumatólogo investigado del Hospital de Medina del Campo
Denuncian “acusaciones genéricas e inconcretas”, así como “numerosas contradicciones” en los fragmentos que conocen del escrito de acusación
Un total de 40 sanitarios de diferentes hospitales de Castilla y León, más uno de Toledo, pidieron a través de una carta pública que se respete la presunción de inocencia del médico traumatólogo investigado del Hospital de Medina del Campo (Valladolid).
En la misiva, los sanitarios recuerdan que “a la vista de las investigaciones en curso, es preciso anteponer la presunción de inocencia a cualquier otra consideración”, más aún, a su juicio, “a la vista de las acusaciones genéricas e inconcretas y a las numerosas contradicciones que se plasman en los fragmentos que conocemos del escrito de acusación”.
Los firmantes señalan que “de producirse las conductas abusivas denunciadas de forma constante y habitual desde el año 2019, dichas ignominiosas prácticas serían observadas siempre por el personal del área de quirófano y reanimación”, lo que les convertiría en “sujetos activos de un delito de encubrimiento pasivo”, algo que este grupo de sanitarios considera “realmente inverosímil”.
Relatan también que el escrito de acusación está “huérfano de cualquier referencia concreta a fechas, circunstancias, personas presentes y pacientes agredidos”, lo que a su juicio, y ante la ausencia de “ningún tipo de denuncia formal durante el periodo que se menciona”, pone “en tela de juicio la total veracidad de las acusaciones”.
Es por ello que, aseguran, es obligado “ser prudentes y esperar el resultado de las investigaciones con la premisa de aplicar la presunción de inocencia” ante un profesional que los firmantes aseguran conocer “durante años” y del que “nunca jamás” han sido “testigos de actuaciones innobles, indecorosas o atentatorias contra la libertad sexual o la dignidad de persona alguna”.
Defienden así que el traumatólogo investigado “era considerado por todos como un buen profesional, dedicado a su trabajo, riguroso en el ejercicio de la profesión y de trato cordial con el enfermo”, si bien era también “exigente con todos los miembros de su equipo”.
“Las instancias competentes deberán poner el máximo empeño en desentrañar la cuestión planteada”, concluye la misiva, pidiendo no obstante “a las personas y a los medios el más escrupuloso respeto” a la memoria del traumatólogo y a las autoridades “el esclarecimiento de la denuncia”, para lo que los firmantes se ponen a su disposición.
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