Investidura

Ni un paso atrás en los derechos de las mujeres

Orgulloso del pacto con Vox, Mañueco quiere que se juzgue al Gobierno de coalición por sus hechos y que no se le ataque por “prejuicios”

Elintenso debate de investidura de Fernández Mañueco como presidente de Castilla y León deja varias reflexiones y frases con contenido y mensajes claros de lo que pretende este nuevo Gobierno de coalición de PP y Vox, -el segundo en esta Comunidad, tras el de los populares con Ciudadanos de la pasada legislatura-, que echará a andar la semana que viene con la toma de posesión el martes de Mañueco, y un día después la de los diez consejeros que formarán parte del Ejecutivo, tres de ellos de Vox.

Y entre los mensajes nítidos que dejaba la sesión plenaria está el que lanzaba el entonces candidato a presidir la Junta sobre la violencia de género y las dudas que hay entre la oposición sobre la Ley de Violencia Intrafamiliar que se incluye en el pacto de Gobierno de Mañueco con García-Gallardo. Al respecto, Mañueco aseguraba, contundente, que la Ley de Lucha contra la Violencia de Género se va a mantener en Castilla y León y que no se dará ni un paso atrás en los derechos reconocidos.

El investido presidente apuntaba que esta normativa de Violencia Intrafamiliar cuyo trámite empezará antes de agosto, tiene como objetivo generar nuevos derechos y proteger “a todas las víctimas”.

Lo digo alto y claro para que todo el mundo lo entienda: vamos a mantener la ley de la lucha contra la violencia de género”, afirmaba, contundente, en referencia a la lucha de su Gobierno contra el maltrato machista, mientras defendía que tanto la Ley de Violencia de Género actual como la de Violencia Intrafamiliar que se aprobará son “necesarias, compatibles y complementarias”.

Respecto a otro e los temas controvertidos del acuerdo entre PP y Vox, el decreto de Concordia que vendría a sustituir al actual de Memoria Histórica, Mañueco avanzaba que antes el 30 de junio su Gobierno va a comenzar la tramitación de una normativa que, según decía, integrará toda la regulación en la materia y tendrá como objetivo reivindicar nuestra historia común y entenderla como un elemento integrador para la reconciliación y para evitar que se use la historia para dividir a los españoles.

Una inmigración ordenada y que no haya “adoctrinamiento” en las aulas son otras e las exigencias de Vox en el pacto de Gobierno que el PP ha aceptado, y que Mañueco defendía también ayer durante la sesión de investidura.

Sobre lo primero, el presidente recordaba que Castilla y León ha sido, es y será siempre una tierra de acogida, y defendía la llegada de extranjeros pero de forma legal y ordenada, favoreciendo la integración cultural, económica y social, para que puedan incorporarse al mercado laboral y garantizando la ayuda social a las personas que lo necesiten.

Y respecto a lo segundo,Mañueco dejaba claro que en los colegios de Castilla y León no se adoctrina. En el acuerdo de PP y Vox, no se detalla la inclusión del denominado ‘pin parental’ que permite a las familias eludir y vetar aquellos contenidos que no consideren apropiados para sus hijos, algo que sí existe en otras regiones como Murcia. En cualquier caso, Mañueco garantizaba una educación de calidad, con equidad y basada en el mérito y la cultura del esfuerzo, para que la Comunidad se mantenga a la vanguardia mundial.

Orgulloso del pacto

El ya investido presidenta se mostraba, sobre todo, tranquilo y feliz por el pacto con Vox, del que además se siente tremendamente orgulloso y, ante las dudas y críticas que ha suscitado, Mañueco pedía que se juzgue a este Gobierno por sus hechos y que no se le ataque por prejuicios.

“Se trata de un Gobierno que refleja la voluntad mayoritaria de los ciudadanos expresada en las urnas, que es necesario para mejorar la Comunidad y que será beneficioso para los castellanos y leoneses”, decía Mañueco, mientras reconocía que queda mucho por construir pero que con este pacto se ha trazado el camino para gestionar de forma eficaz los intereses de Castilla y León.

Además, el líder del PP aseguraba que se trata de un acuerdo que asegura un Gobierno fuerte y sólido y que garantizará la estabilidad durante los próximos cuatro años. Al respecto, el futuro vicepresidente de la Junta,Juan García-Gallado, de Vox, le pedía a Mañueco que esté tranquilo pero que se mantenga firme en lo pactado, porque Vox es un socio de leal y de fiar.