El incendio de Ávila se extiende lentamente y corta la AV-922 desde Pedro Bernardo

Castilla y León sigue sufriendo un verano calamitoso en la lucha contra el fuego, con más de 80.000 hectáreas quemadas en distintos incendios, con Zamora y Ávila como protagonistas.

Precisamente en esta última provincia se encuentra activo el fuego de mayor relevancia de las últimas horas y que se está cebando en el sur de este territorio, en el conocido como Barranco de las 5 Villas en el término municipal de Santa Cruz del Valle, una zona que ya sabe como se las gasta el fuego, ya que ya sufrió en 2009 un gran incendio en el que ardieron 5.000 hectáreas de varios términos municipales y dos personas perdieron la vida.

Una zona que históricamente se ha visto muy afectada por este tipo de siniestros, sobre todo Pedro Bernardo, municipio cercano al de Santa Cruz del Valle y donde también el fuego ha llegado ya.

El incendio sigue en nivel 2 de peligrosidad por su cercanía a las poblaciones de la zona aunque de momento no ha habido que evacuar a nadie ya que se encuentra alejado de los pueblos de la zona, aunque desde los cascos urbanos la perspectiva es diferente.

Esta tarde se ha cortado la carretera provincial AV-922 desde Pedro Bernardohasta el puerto del municipio ante la situación generada.

Numerosos medios están trabajando en la zona -unos catorce helicópteros; un avión de coordinación; tres aviones anfibios y cinco aviones de carga en tierra además de unas 400 personas-, con especial incidencia en el flanco derecho del monte, que es el más activo. Y así van a seguir este domingo después de una noche “de intenso trabajo”, en la que el fuego ha seguido extendiéndose, hasta tratar de “asegurar el perímetro”.

Las altas temperaturas existentes durante toda la jornada, la humedad relativa, la orografía de la zona y la alta carga de combustibledificultan las tareas de extinción del incendio.

Un miembro de los Equipos de Lucha contra Incendios Forestales (ELIF) que tratan de sofocar el fuego declarado en Ávila ha tenido que ser trasladado a un centro de salud debido a un golpe de calor, han informado este domingo fuentes de la Junta de Castilla y León.

El afectado es un peón de la ELIF-ALFA-2 del operativo INFOCAL del Ejecutivo autonómico, que trabaja para apagar el incendio desatado el pasado viernes en Santa Cruz del Valle (Ávila), que al menos ha arrasado ya 500 hectáreas.

El director técnico de extinción del dispositivo gestionado por la Junta de Castilla y León, Carlos Mendiguchía, muestra su preocupación “porque todo lo que puede ir mal, está yendo mal”.

“El fuego tiene muchísima intensidad”, advierte aunque en lo positivo destaca la baja fuerza del viento y el trabajo del operativo han contribuido a que “el perímetro no haya corrido” ya que “avanza, pero poco a poco”.

Intencionado

Para la Junta existen “indicios de intencionalidad” en este incendio aunque el alcalde de Santa Cruz del Valle, Enrique Rodríguez, lo tiene claro: “Es intencionado con Mayúsculas”. El primer edil de es municipio de apenas 350 habitantes, que se ha visto obligado a suspender las fiestas en honor al Santísimo Cristo Arrodillado, apoya su tesis de la intencionalidad en que el viernes cuando se declaró el fuego no hubo tormentas,ni aire ni otros elementos que pudieran originar este incendio en este bello paraje de la Andalucía abulense, como así conocen también popularmente a esta zona, en la que predominan mayoritariamente los pinos resineros.

Por otro lado, cabe señalar que durante las tareas de extinción de ayer, un brigadista perteneciente a la Brigada de Refuerzo ante Incendios Forestales (BRIF) del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico situada en la base abulense de Puerto el Pico, sufrió un esguince de rodilla durante las tareas de extinción del incendio.

El profesional fue derivado al centro de salud de Arenas de San Pedro, según informa la Consejería de Medio Ambiente.

En lo que va de verano, la provincia de Ávila ha sufrido varios incendios, entre los que sobresale el de Cebreros, que arrasó más de 4.200 hectáreas, junto al de San Juan de la Nava, en el que ardieron más de 500.