Tecnología
En junio de 2022 Coco Restaurante sumó un nuevo empleado a su plantilla. Un camarero capaz de transportar varios platos en un solo viaje, servicial, respetuoso y un poco bromista, que además presume de tener cuenta de Instagram. Su nombre, Coquito, un robot ayudante de cocina que desde hace varios meses sirve de apoyo a los trabajadores de este restaurante burgalés, y que además destaca por ser el primer robot camarero de Castilla y León. Desde su puesta en marcha han llegado otros robots con la misma función a la Comunidad, aunque Coquito es ya toda una eminencia en Burgos.
Este robot, de color blanco y negro, se compone de tres bandejas de color rojo que permiten transportar infinidad de platos a los comensales. “Nos ahorra los viajes de ir a la cocina, pero no hace pedidos y la gente tampoco puede coger de él los platos. Nuestra intención es que sea un ayudante de camarero”, explica el Relaciones Públicas de Coco Restaurante, Daniel Mata, en declaraciones recogidas por Ical.
De esta forma, aunque existen varios modelos de robots de cocina, la labor de Coquito se centra en ir a la cocina del restaurante, donde el cocinero lo carga y, sirviéndose de la tablet que lo acompaña, le explica a dónde tiene que ir cada bandeja. El robot entonces se dirige a las mesas correspondientes, donde un camarero se encarga de coger cada plato y colocarlo en la mesa.
Tal y como explica Mata, la idea surgió por varias razones. En primer lugar, porque estaban muy acostumbrados a ver este tipo de robots en las ferias de hostelería a las que asistían y les “picó” la curiosidad. A esto se unió la falta de personal que hay en la hostelería. Una empresa de Elche, Bumerania Robótica, de dónde proviene Coquito, les ofreció probar un modelo y tras ponerlo a prueba en su restaurante decidieron quedarse con él.
“Al principio estábamos reticentes”, admite Mata, que asegura que a todos les costó acostumbrarse a él, porque su ritmo es “más lento” que el de un camarero para evitar que se caigan los platos, aunque sí demuestra ser “más práctico”, ya que permite llevar de una sola vez muchos más platos. Por ello, Mata confiesa que este compañero “ahorra mucho trabajo” a los camareros. “Ahora se atienden mejor las mesas, puedes tratar más al cliente y la comida llega a tiempo”, afirma.
De hecho, notan especialmente su ayuda durante los meses de verano, porque tienen que atender no solo las mesas de dentro del restaurante, sino también las 50 que hay en terraza, y pueden llegar a transportar más de 2.000 platos de raciones. De hecho, este ayudante ahorra siete kilómetros cada fin de semana a los camareros del restaurante, especialmente en los meses de verano.
Coquito forma parte de la tercera generación de robots y funciona como el conocido aspirador Roomba, que realiza un mapeado inicial del entorno, identificando los obstáculos y con unas sencillas indicaciones, se aprende sus recorridos. Además de eso, Coquito dispone de cámaras que le permiten esquivar obstáculos, e incluso señala con sus intermitentes traseros si va a girar a la izquierda o a la derecha.
De hecho, si Coquito se topa con alguien, suelta frases como: “Sé que soy atractivo, pero me tengo que ir” o “Uff, no puedo avanzar, ¿podría moverse un poco para que pueda pasar?”, o incluso lleva a las mesas tartas mientas suena en sus altavoces el Cumpleaños Feliz. Desde el restaurante aseguran que este robot llama mucho la atención de la gente, especialmente de los más pequeños, que se sorprenden mucho al verlo.
De hecho, fiel a sus seguidores, Coquito dispone de una cuenta de Instagram, donde sube distintos vídeos y donde los clientes pueden etiquetarlo en las fotos que suben cuando acuden al restaurante.
Además en esta cuenta se puede ver a Coquito presumiendo de su orgullo burgalés durante las fiestas de San Pedro y San Pablo, llevando el tradicional pañuelo rojo de las fiestas, y tal y como adelantó Mata, tienen pensado disfrazarlo de Papá Noel para estas fechas navideñas.