Turismo

Este precioso pueblo medieval menos conocido está considerado como el mejor de España para disfrutar en verano

Destaca por su entorno natural, su muralla y su impresionante castillo

Castillo de Miranda del Castañar (Salamanca)
Castillo de Miranda del CastañarHISPANIA NOSTRAHISPANIA NOSTRA

El calor aprieta, y mucho, en estos últimos días de verano. La gran mayoría ya está pensando en coger las malestas para disfrutar de unas más que merecidas vacaciones, mientras que los menos afortunados se conforman con el fin de semana. Cada vez hay más gente que apuesta por la tranquilidad y evitar grandes aglomeraciones. Pues en os vamos a ofrecer un destino único, pero lo que es más importante, que no es tan conocido como los Pedraza, Frías, Santilla del Mar, Puebla de Sanabria, Sigüenza, etc.

Pero que no sea tan conocido no quita de que sea impresionante y forme parte de la Asociación de los Pueblos Más Bonitos de España. Destaca por su entorno natural, su espectacular patrimonio cultural y, como no, por su rica y variada gastronomía. Un lugar no tan conocido pero ideal para disfrutar este verano de unos días de descanso y tranquilidad en familia.

La "joya turística" de la que estamos hablando es el pueblo medieval salmantino de Miranda del Castañar, que nació en el siglo XII con la orden Hospitalaria de Jerusalén, y se consolidó tras la repoblación de Alfonso IX de León en el siglo XIII, que hizo de Miranda la capital administrativa de la Sierra de Francia, al convertir este rey de León en 1213 a Miranda en villa y concejo, del que dependían la mayoría de los pueblos serranos.

Cuenta con la declaración de Conjunto Histórico desde el 8 de marzo de 1973, y se levanta sobre un promontorio rocoso, en pleno corazón de la Sierra de Francia. Sólidas murallas circunvalan la localidad, en la que sobresalen las solemnes torres del Homenaje de su castillo y la de las Campanas de su iglesia parroquial.

Hay constancia de que en 1282 ya era señor de Miranda el infante Pedro, hijo de Alfonso X el Sabio y de Violante de Aragón. El infante Pedro también fue señor de Ledesma, Cabra, Alba de Tormes, Montemayor del Río, Salvatierra, Galisteo y Granadilla, y también poseía toda la ribera del Río Coa y las villas de Sabugal, Castelo Rodrigo, y Alfaiates, que actualmente forman parte de Portugal.

A la muerte del infante Pedro, en octubre de 1283, la mayoría de sus señoríos fueron heredados por su único hijo legítimo, Sancho el de la Paz, que falleció en 1312 sin dejar descendencia legítima, por lo que a su muerte todos ellos, incluyendo los de Miranda del Castañar y Ledesma, volvieron a la Corona, durante el último periodo del reinado de Fernando IV de Castilla.

Posteriormente, en 1423, el rey Juan II donó la villa de Miranda del Castañar a Pedro de Zúñiga y, en 1457, el rey Enrique IV creó el condado a favor de su hijo, Diego López de Zúñiga. El condado pasó a la casa de Alba en el siglo XIX debido al matrimonio entre el XV duque de Alba y Francisca de Sales Portocarrerro Palafox y Zúñiga, XVIII condesa de Miranda del Castañar.

Con la creación de las actuales provincias en 1833, Miranda del Castañar pasó a integrarse en la de Salamanca, dentro de la Región Leonesa, según señala Wikipedia. En la actualidad sigue perteneciendo a la provincia salmantina y en 2017 fue considerado como uno de los Pueblos Más Bonitos de España.

Como todo pueblo de bien Miranda del Castañar, cuenta con su leyenda. Los más ancianos del lugar que dos niñas estaban buscando fresas en el monte, no tuvieron suerte en su búsqueda, y hubo un momento que fueron más allá de lo permitido, ladera abajo del recinto amurallado, en la confluencia de los ríos Francia y San Benito. Una vez allí se entretuvieron y viendo que el viaje no había dado los resultados esperados se volvieron hasta Miranda. En su regreso las dos niñas se detuvieron al observar en el tronco de un olivo, un resplandor que les llamó su atención, lo que les hizo acercarse y descubrir una talla de una Virgen, de origen románico, que se denomino la Virgen de la Cuesta, patrona de la Villa. En el lugar se decidió construir una ermita.

Atractivos monumentales

- Ermitas: Miranda del Castañar conserva dos de las cinco ermitas que tuvo: la ermita del Cristo del Humilladero a la entrada de la localidad y, fuera del recinto amurallado, la ermita de la Virgen de la Cuesta, patrona de la localidad, de estilo gótico con retablo churrigueresco, bien conservada y con vistas espectaculares a la Peña de Francia.

- Conjunto monumental: Por sus calles se respira la historia medieval de la villa que fue. Descubrir la organización de sus calles, quizá árabe, quizá judía, entender cómo sus habitantes han hecho de la necesidad virtud y alegría de vivir, compartiendo casas y bodegas ha dado un entramado de propiedades peculiar y una idiosincrasia a las casas y calles, que solo se entiende hablando con los mirandeños, contemplando su arquitectura y dejándose llevar por lo que las piedras nos cuentan.

- Castillo: El castillo de los Zúñiga o de los condes de Miranda del Castañar, está situado al este, es uno de las mejor conservados de la provincia salmantina, y se distribuye a lo largo de una planta de trapecio irregular, con cubos en los ángulos, donde se abren ventanas geminadas.

Todo indica que fue reconstruido a principios del siglo XIV sobre un castillo anterior del siglo XII, junto con parte del recinto en 1451, según reza la inscripción que, sobre un blasón de los Zúñiga, se halla en la cara oriental, coincidiendo con la señorialización de la villa.

En la actualidad el castillo nuevamente pertenece a manos privadas tras la donación a la Villa realizada en 1954 por Cayetana Fitz-James Stuart, duquesa de Alba.

- Muralla: La localidad de Miranda del Castañar es reconocida por ser una de las pocas de España en conservar en su totalidad la antigua muralla medieval. Sus muros cuentan tan solo con cuatro vanos, cada uno orientado a un punto cardinal: la de Nuestra Señora, San Ginés ( junto al castillo y la vieja alhóndiga), el Postigo y la de la Villa.

- Iglesia parroquial: El templo lleva el nombre de Santiago y San Ginés de Arlés, debido a que la construcción honra la imagen de estos dos santos. Es una construcción sencilla y que, a pesar de ser de estilo gótico, no alcanza gran altura ni dimensiones. Su origen tuvo lugar durante los siglos XIII y XIV, aun que ha sufrido modificaciones posteriores. En la actualidad hay zonas que se encuentran bastante deterioradas. La iglesia destaca por sus muros de piedra en mampostería.

Frente a la Iglesia se alza la Torre de las Campanas, del XVII. Su coste fue sufragado por los vecinos incluidas las campanas para no tener que pagar por su uso a la iglesia cuando tuvieran que sonar para convocar a los vecinos, anunciar muertes o catástrofes.

- Alhóndiga:Casa pública o sitio real, donde se compraba y se vendía e, incluso, se almacenaba el grano y se realizaban las transacciones comerciales, de finales del siglo XVI, actualmente es la sede del Ayuntamiento.

- Plaza de Toros: Su peculiaridad e interés reside en que se trata de la plaza de toros cuadrada más antigua que podemos encontrar en España. Es también el antiguo patio de armas del Castillo de Zúñiga. Esta plaza, también conocida con el nombre de Coso Taurino fue construida durante el siglo XVI. Su interior puede albergar unas 2.000 personas.

Atractivos naturales

Miranda del Castañar se encuentra ubicado en plena Sierra de Francia. Sus valores naturales y culturales la han convertido en uno de los lugares más afamados de España. Además de que gran parte de su territorio coincide con el Parque Natural de Las Batuecas-Sierra de Francia y la Reserva de la Biosfera, sus pueblos conservan un encanto al que no puede resistirse quien lo visita.

El recorrido puede iniciarse en la Peña de Francia, auténtico mirador de toda la provincia. Hacia el sur, el mágico valle de Las Batuecas invita al recogimiento, entre ermitas y pinturas prehistóricas.

Seis pueblos están reconocidos como conjuntos históricos por su riqueza patrimonial:La Alberca, Mogarraz, Miranda del Castañar, Sequeros, San Martín del Castañar y Villanueva del Conde, sin olvidar otras localidades como Linares de Riofrío, puerta de la Sierra, o el medieval Monleón.

Una interesante propuesta son los Caminos de Arte en la Naturaleza, que permiten disfrutar del parque natural entre obras escultóricas. También es posible recorrer antiguas minas de oro romanas en El Cabaco, o pasear por la densa red de senderos existente.

En Miranda del Castañar destaca la ruta: - El camino de los prodigios: Se trata de una ruta circular de alrededor de 11 kilómetros de longitud, con un desnivel acumulado de 475 metros y una altitud máxima de 821 m2 que parte de Miranda del Castañar y pasa por Villanueva del Conde para terminar nuevamente en Miranda del Castañar.

También cuenta con algunos caminos secundarios a lo largo del recorrido. En alguno de ellos se pueden encontrar obras arquitectónicas como el puente sobre el arroyo de San Benito. En él se pueden contemplar obras de los artistas Félix Curto, Alfredo Omaña, Marcos Rodríguez y Pablo S. Herrero. La obra de Alfredo Omaña destaca especialmente por sus instalaciones de camas en la naturaleza, la de Marcos Rodríguez por esculturas de animales en piedra.

Gastronomía

Como no podía ser de otra manera Miranda del Castañar destaca por poder degustar los platos típicos de la zona como son las carnes, los embutidos ibéricos y los asados, además de las legumbres, todos ellos bañados con los riquísimos vinos de la comarca (D.O.P. Sierra de Salamanca). Además, la zona es reconocida por la miel y los quesos de cabra y oveja.