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Tore Godal, el hombre que ha salvado la vida a 13 millones de niños

En 1999 convenció por carta al magnate Bill Gates para que donase 750 millones de dólares para iniciar una campaña de vacunación global que ha inmunizado a 760 millones de niños

EL doctor noruego Tore Godal, una de las personalidades de la medicina más importantes de la actualidad
EL doctor noruego Tore Godal, una de las personalidades de la medicina más importantes de la actualidadU.S. Mission Geneva / Eric BridiArchivo

Una simple carta de cinco folios convenció a Bill Gates en 1999 para que donase 750 millones de euros a un nuevo programa internacional de acceso a la vacunación. Ese día nacía la Global Alliance for Vaccination and Inmunization, asociación que desde el año 2.000 ha vacunado a más de 760 millones de niños y que se calcula que ha salvado la vida de por lo menos 13 millones de ellos, que sin vacuna hubiesen desarrollado la enfermedad y fallecido. Y todo gracias a un doctor noruego que decidió que, para salvar vidas, tenía que inmiscuir a la sociedad civil. Su nombre, Tore Godal.

Desde entonces, se calcula que ha conseguido acumular 20.000 donantes diferentes. Pocas personas han hecho tanto para conseguir la vacunación universal y que el acceso a los medicamentos no esté restringido por el hecho del lugar donde naciste. Y su empeño, a pesar de sus 80 años, continúa. “Ha sido un reto. El sector público reclamaba el desarrollo de vacunas del VIH, tuberculosis y la malaria, mientras el sector privado pedía un crecimiento de la producción de vacunas existentes infrautilizadas. En ese contexto aparecimos nosotros”, recuerda Godal, que ha centrado su objetivo en vacunas contra la hepatitis B, la haemophilus influenzae tipo b, el rotavirus y la enfermedad pneumococcal

El doctor estudió medicina en la Universidad de Oslo y se especializó en microbiología e inmunología. Inició su carrera en Etiopía a principio de los años 70, en un programa de investigación sobre la lepra donde descubrió que la respuesta inmunológica era mucho más importante que la infección bacterial en sí. En contra de la opinión de los doctores de la Organización Mundial de la Salud empezó a tratar a los enfermos con un combinación triple de antibacteriales. La respuesta fue tan positiva que la OMS rectificó sus protocolos y reclutó a Godal para su centro de investigación.

Entre sus muchos logros está algo que parece ahora tan obvio como la introducción en las casas de redes antimosquitos con insecticida para evitar el crecimiento de la malaria. Introdujo esta medida en cuatro países africanos cediendo redes a un millón de personas. Los resultados fueron espectaculares. “La mortalidad de la enfermedad se ha reducido hasta un 50 por ciento en estos años. Cada años, calculamos que 500.000 niños sobreviven gracias a estas redes”, comenta.

Pero su gran logro llegaría en 1999 cuando consiguió que la fundación de Bill y Melinda Gates se involucrasen en la creaciòn de GAVI, con una donación a cinco años de 750 millones de dólares. “La verdad es que Bill me confesó que le temblaba la mano cuando firmó ese cheque, pero que cinco años después reconocía que era la mejor inversión que había hecho nunca", comenta Godal.

Entre sus múltiples proyectos destacan el ensayo de inmunoterapias en el tratamiento del cáncer, el estudio de medicinas tropicales, y la creación de redes estables de donantes, con beneficios fiscales, que han multiplicado el dinero para investigación y desarrollo de vacunas. “La mejora en la higiene y la vacunación ha posibilitado una mejora sustancial en la salud global. Y medicinas gratuitas para enfermedades tropicales por parte de grandes compañías farmacéuticas han tenido un gran efecto”, señala Godal.

En la actualidad, sigue siendo asesor de la sanidad noruega y todavía colabora con la OMS. El pasado 23 de noviembre recibía una medalla al mérito por sus increíbles logros por parte del rey de Noruega, un reconocimiento menor para una persona que debería ser conocida en todo el mundo con nada más oír su apellido. Persona modesta, de voz suave, convencido que las acciones valen más que mil palabras, su única afición aparte de salvar vidas es el ski.