Sanidad

La Generalitat quiere fortalecer el sistema sanitario por el aumento de las desigualdades por la pandemia

Argimon presenta un Plan de Salud 2021-25 centrado en la lucha contra las brechas sociales

El conseller de Salud, Josep María Argimón, durante la reunión semanal del Govern celebrada este martes. EFE/Toni Albir
El conseller de Salud, Josep María Argimón, durante la reunión semanal del Govern celebrada este martes. EFE/Toni AlbirToni AlbirAgencia EFE

Cataluña ha presentado su Plan de Salud 2021-2024, el primero diseñado en el contexto de la crisis sanitaria generada por la pandemia y, en este sentido, el conseller de Salud, Josep María Argimon, ha sido el primero en reconocer que, en estos dos últimos años, “la respuesta sanitaria no ha sido suficiente para abordar las necesidades de la covid y es necesario fortalecer el sistema sanitario”, que ha calificado de tensionado.

En este contexto, las principales líneas de acción que establece este nuevo plan, que pretende ser más estratégico, con una menor concreción, para actuar así como una brújula, buscan una transformación sistémica con una visión transversal que logre alinear a los diferentes actores con el fin de acabar con las desigualdades, incidir en la importancia de los estilos de vida, trabajar en favor del bienestar emocional y la salud mental, poner el foco en la cronicidad y la fragilidad, así como en las enfermedades transmisibles y pandemias, priorizar el tema de la violencia y el de la contaminación ambiental y abordar lo relativo a la medicalización de la vida cotidiana.

Las grandes prioridades del sistema de salud que propone el nuevo plan son, pues, el poner a la persona en el centro de su propia salud, apostar por la equidad y calidad de la atención, por los profesionales y por la perspectiva de género, fomentar la colaboración entre los agentes públicos y potenciar y apoyar la investigación.

Y, para ello, el plan fija cuatro grandes estrategias: igualdad de oportunidades en salud, entornos saludables, integración de la atención en la salud y palancas de cambios transversales para actuar de forma coordinada con otros actores de fuera del sistema de salud. En definitiva, el nuevo plan pretende combatir las desigualdades en salud desarrollando un trabajo transversal con agentes de otros sectores, así como también apuesta por poner el foco en los profesionales sanitarios y considera imprescindible invertir en la salud mental y el bienestar de la población.

Este planteamiento no ha dejado satisfechos a algunos grupos parlamentarios, que han echado en falta una abordaje del plan de salud más centrado en tratar de solventar las carencias puestas de manifiesto a raíz de la pandemia y orientado a dar respuesta a las necesidades reales de ciudadanos y profesionales en el actual contexto sanitario.

Así lo ha manifestado, por ejemplo, María García Fuster, de Vox, mientras que David Cid, de En Comú Podem, ha reclamado una mayor atención a la situación de los profesionales, tanto en lo que se refiere al número de efectivos como en lo relativo a la mejora de sus condiciones de trabajo.

El tema de los presupuestos también ha sido uno de los asuntos que ha generado debate y es que el conseller Argimon ha indicado que este año el departamento de Salud contará con un presupuesto de 12.400 millones de euros, 1.200 millones más que el año anterior, una cifra que, pese al incremento, considera insuficiente si tenemos en cuenta que “en 2021 se gastaron 13.800 millones de euros”. Y puesto que para Argimon seguimos en la misma situación que el año pasado, es necesario poner al departamento de Salud en ese gasto, de manera que esa diferencia de 1.400 millones entre los presupuestado y el gasto estimado para este año debe cubrirse con fondos extraordinarios del Estado, que co y el gasto estimado para este año debe cubrirse con fondos extraordinarios del Estado, que cree que llegarán , pero, de no ser así, “habrá que buscar aquí ese dinero”