El separatismo pierde otro bastión: se prohíben los cortes de la Meridiana 850 días después

La Generalitat ha tardado casi tres años y 850 días (desde el 14 de octubre de 2019) para prohibir los cortes en la avenida Meridiana, pero, finalmente, ha tomado la decisión ante el clamor de grupos constitucionalistas y, sobre todo, de los vecinos de la zona, que veían condicionada su movilidad cada tarde a la vuelta del trabajo. Hay que recordar que la avenida Meridiana es una de las principales arterias de entrada a Barcelona y todas las tardes, la Guardia Urbana tiene que redirigir el tráfico por calles adyacentes por la protesta: con el añadido, además, de que cada vez son muchos menos los participantes en esta movilización, lo que genera aún más impotencia entre los afectados por los cortes porque ven que una decena de personas es capaz de perjudicar a mucha gente.

Uno de ellos, Albert, tenía que ir cada día a pie por culpa de los cortes. «Menos mal que se van, eran 10 abuelos, ya está bien, ponían en jaque a todo el barrio cada día, estábamos hartos», valora, en declaraciones a este diario. En la misma línea se han expresado algunos líderes políticos, como Jaume Collboni (PSC), quien ha considerado que «cuatro gatos corten diariamente la Meridiana era una burrada». O, Josep Bou (PP), quien ha colgado en sus redes un vídeo con un comerciante que denuncia los perjuicios económicos para su local: «Dos años que nos han llevado casi a la ruina», También la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau. «Por fin la Generalitat ha anunciado que pondrá fin a las molestias que los vecinos sufrían desde 2019 con los cortes de la Meridiana», señaló ayer.

La conselleria de Interior, que encabeza Joan Ignasi Elena, ha denegado al independentismo continuar permitiendo estos cortes a partir de este sábado. Es decir, este viernes se registrará la última concentración en la avenida Meridiana por parte del separatismo, que pierde, de esta manera, otro bastión y da una señal más de su declive. Y es que el «procés» se hizo fuerte gracias a la calle, pero, poco a poco, se ha ido desmoronando por la frustración que ha generado entre las bases todas las promesas incumplidas. Eso se ha ido traduciendo en una menor movilización y eso se ha visto también reflejado en estos cortes, a los que acudía ya muy poca gente.

A partir de ahora, la concentración estará autorizada en una plaza cercana, que conecta la Meridiana con el paseo Fabra i Puig, frente a la estación de Renfe. La nueva ubicación ya no permitirá a la plataforma independentista Meridiana Resisteix cortar la Meridiana, como venía haciendo desde octubre de 2019 para protestar por la condena a los líderes del 1-O al tener la autorización de la Generalitat para concentrarse en esta avenida, pese a que el Ayuntamiento de Barcelona y la oposición habían pedido varias veces poner fin a los cortes.

La Asamblea Nacional Catalana se encargaba de notificar ante la conselleria de Interior las concentraciones (es un trámite obligatorio). Sin embargo, la ANC explicó ayer que fue informada por la dirección general de Administración de Seguridad del Departamento de Interior, de la «denegación del permiso para ejercer el derecho fundamental de manifestación del 12 al 27 de febrero en la Avenida Meridiana».

Dirigentes destacados de JxCat salieron a criticar la decisión de la conselleria de Interior, que está en manos de Esquerra.