Urbanismo

Los barrios del Besòs de Barcelona se rebelan contra el abandono de la Generalitat

Pese a recuperar y adecentar el río, la desigualdad se ha enquistado en la ribera del río

Parque fluvial del Besòs en Barcelona
Parque fluvial del Besòs en BarcelonaLa Razón

El tramo final del río Besòs se ha transformado en el escenario de la fiesta ciudadana Va de Besòs, con más de un centenar de actividades. El objetivo es cohesionar a los municipios vecinos que comparten el cauce del río y reivindicar el patrimonio y la belleza de este espacio. Los ayuntamientos de Barcelona, Montcada i Reixac, Sant Adrià de Besòs y Santa Coloma de Gramenet organizan esta cita con el apoyo del Consorcio del Besòs. Las plataformas vecinales implicadas han aprovechado para hacer oír sus reivindicaciones.

Como cruza una zona densamente industrializada y poblada, durante los años 1970 y 80 se hizo tristemente famoso por ser el río más contaminado de Europa. Desde mediados de los 90 se ha limpiado y depurado sus aguas. Aprovechando la remodelación urbanística del Fórum Universal de las Culturas se inauguró el parque fluvial del Besós situado entre Barcelona, Santa Coloma de Gramenet y Sant Adrià de Besòs. Hoy, el parque fluvial tiene 115 hectáreas de terreno y cinco kilómetros de carril bici. Antes del desastre ecológico de 2019, había 200 especies de pájaros que hacían los nidos en las islas artificiales del parque. Pero una cosa es adecentar el río y otra muy diferente darle salida a los barrios circundantes, tradicionalmente de los desfavorecidos del área metropolitana de Barcelona

En este contexto, los organizadores del evento, Va de Besòs tratan de unificar las poblaciones que flanquean los últimos metros del río antes de llegar al mar, donde se apiña un alto número de barrios en que sus habitantes declaran bajos ingresos. Más allá de algunas medidas dispersas que han generado debate como el plan urbanístico alrededor de las Tres Xemeneies, el combate contra la pobreza enquistada y agravada en la ribera sigue siendo cuestión particular de la capacidad de cada municipio para hacerle frente. Y, claro, no es lo mismo Santa Coloma que Barcelona.

El pistoletazo de salida de la jornada, en cualquier caso, se hizo en el Parque de las Aguas de Montcada i Reixac con las alcaldesas de los municipios, pero la programación se repartió en cuatro puntos de los cuatro municipios para facilitar que pueda participar todo el mundo.

Las actividades fueron para todos los públicos y muchas están relacionadas con la fauna y flora del Besòs, así como el patrimonio artístico y arquitectónico. Por ejemplo, se pudo ver cómo se hace el anillamiento científico de pájaros, descubrir las mariposas, dar un paseo sensorial o un recorrido de marcha nórdica. También tuvieron la posibilidad de realizar una ruta guiada por una decena de masías situadas en este tramo del río y las casas baratas del Bon Pastor.

Desde la fiesta ciudadana, la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, pidió cooperación entre administraciones para recuperar social y económicamente el cauce del río. La alcaldesa destacó que el Besòs es la zona más densa en términos de población de Cataluña: «El 10% de la población catalana vive alrededor de este cauce». Pero, en cambio, lamentó Colau, «es donde está uno de los mayores índices de desigualdad». Hay «deberes pendientes», aseguró, y para revertir esta situación, la candidata para las elecciones de 2023 pidió destinar una partida en los presupuestos, por lo que apeló directamente al gobierno de la Generalitat.

Colau se mostró preocupada por el retraso de la presentación de los presupuestos catalanes a raíz de la ruptura del gobierno de la Generalitat y pidió aunar esfuerzos para revertir la «deuda histórica» con los vecinos de los municipios junto al río. «Los municipios que compartimos el Besòs lo tenemos clarísimo, ahora toca que lo haga la Generalitat, los municipios lo hemos estado intentando, pero estamos infrafinados», aseguró Colau, que sugirió la utilización de fondos europeos.

Para la alcaldesa, es necesario crear nuevos puestos de trabajo en el Besòs, rehabilitarlo y hacer políticas sociales fuertes para extraer todo su potencial. Puede ser una «grandísima centralidad de Cataluña, que puede aportar mucho al país».

La alcaldesa de Barcelona también recordó que el Besòs actual es fruto de una cooperación histórica entre administraciones y municipios que permitió «recuperar un recurso natural, imprescindible ahora en pleno cambio climático» que ha definido como tesoro ecológico. P