
Meteorología
Cataluña deja atrás un junio extremadamente cálido y un julio otoñal
De cara a los meses de septiembre, octubre y noviembre, se esperan temperaturas por encima de lo habitual y precipitaciones propias de esta época del año

Este último verano en Cataluña ha sido singular, tanto por lo que se refiere a la temperatura como en lo relativo a las precipitaciones. Y es que ha sido el tercero más cálido, por detrás del de 2022 y 2003, con una media de 23,3º, lo cual supone una anomalía de 1,8º respecto al periodo de referencia (1991-2020), y especialmente húmedo, sobre todo durante un mes de julio que registró lluvias más propias del periodo otoñal.
En cuanto a las temperaturas, destaca un junio extremadamente cálido, de hecho, el más cálido de la serie con una media de 23,5º y una anomalía de 3,9º. Sorprendentemente, este mes registró una temperatura más elevada que julio, cuando la anomalía fue de 0,3º, algo que es inaudito. Es más, durante el último verano, se produjeron dos episodios u olas de calor, uno de ellos entre el 10 de junio y el 2 de julio y otro entre el 9 y el 18 de agosto, con varios picos de calor, mientras que entre ambos, cuando lo habitual es que esperar temperaturas altas, se registraron temperaturas moderadas e incluso algún episodios de frío.
Esas dos olas de calor afectaron a toda Cataluña e incluyeron dos picos intensos: el 29 de junio y el 16 de agosto, cuando se alcanzaron los 36,3º, que aún quedan lejos de los 37,9º que se registraron en el verano de 2019. Durante estos episodios, se produjeron además dos periodos persistentes, en los que las altas temperaturas se prolongaron varios días, concretamente 6 y 10 días. Así, entre el 27 de junio y el 2 de julio y entre el 9 y el 18 de agosto se superaron los 33 grados, unas olas de calor que son cada vez más frecuentes.
Al respecto, Ramón Pascual, delegado territorial en Cataluña de AEMET, indica que "es la primera vez que se registran dos olas de calor muy persistentes en el mismo verano", para a continuación señalar que "este mes de junio ha habido muchos días en los que se han superado los 35º, algo que estamos normalizando".
Un mes de julio otoñal
En definitiva, este último verano se ha caracterizado por un mes de junio extremadamente cálido y un julio más moderado, contrariamente a lo que suele ser habitual, y episodios de calor muy persistentes, mientas que, en cuanto a las precipitaciones, ha sido un verano húmedo, con una media de 164 l/m2 y un porcentaje de precipitaciones respecto al valor de referencia del 122%. En este sentido, cabe destacar que desde 2020 no se superaba el rango de valores normales.
Tras un junio seco, con un 37% de precipitaciones y 19 l/m2 de media, julio fue extremamente húmedo. Así pues, ese mes la media fue de 92 l/m2, para alcanzar un porcentaje de precipitaciones del 256%, mientras que agosto dejó cifras -113% y 53 l/m2- de un mes húmedo.
"En julio, al bajar la temperatura tras un junio cálido, se registraron precipitaciones más características de un mes otoñal", señala Beatriz Téllez, jefa de meteorología de la AEMET en Cataluña, con dos días, el 12 y el 23, de los más lluviosos del verano en este siglo y éstos tuvieron lugar en apenas 15 días. Fueron dos jornadas extraordinarias en cuanto a precipitaciones, pero además también resultó singular el que esas fuertes lluvias tuvieran lugar en la costa y el mar, algo que es más propio del patrón de precipitaciones del otoño.
De hecho, en lo que va de año, el 2025 nos ha dejado unos meses de marzo y julio extremadamente lluviosos. Sobre las circunstancias que han propiciado una alto pluviosidad en julio, con episodios de intensas lluvias, Ibai Campo, jefe del grupo de Predicción y Vigilancia de AEMET en Cataluña, explica que "un mes de junio extremadamente cálido dejó temperaturas del mar sobreelevadas más propias del final del verano, lo produjo vapor de agua, que, unido a estructuras que inestabilizaron la atmósfera, como fue una dana el 12 de julio y una vaguada de niveles medio-altos el 23 de julio, dieron como resultados lluvias de excepcional intensidad, incluso torrenciales".
De cara a este otoño, los meteorólogos prevén unos meses de septiembre, octubre y noviembre "cálidos, con temperaturas por encima de lo normal" y, en cuanto a las precipitaciones, auguran un "lluvias relativamente abundantes, como son características en esta época del año", anuncia Téllez.
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