Puig marca como reto de 2020 un «gran pacto verde» que no convence ni a PP ni a Ciudadanos

El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, eligió un escenario inusual para dar su mensaje de fin de año. La aldea requenense de Casas del Río, en el Valle del Cabriel, declarado este año como reserva de la biosfera por la Unesco, fue el lugar desde el que pronunció un discurso que tuvo dos ejes destacados, luchar contra la emergencia climática y contra la despoblación en la «periferia» del territorio valenciano.

Anunció que promoverá en 2020 un gran pacto verde valenciano que implique a toda la sociedad en un acuerdo «transversal» para hacer frente a la emergencia climática con medidas como un pacto por los bosques, la ley de Transición Energética o la Estrategia Valenciana por la Biodiversidad.

Puig quiso escenificar la necesidad de afianzar la cohesión territorial y luchar por la sostenibilidad, objetivos ambos que declaró como una «obligación moral».

Defendió una transición justa, que no deje a los más vulnerables como víctimas de la defensa del planeta y pidió establecer un nuevo «contrato social de la humanidad» por la superación de las desigualdades, por el trabajo decente y por la biodiversidad protegida.

«No podemos aceptar que se deterioren el agua y la fauna de la Albufera; no podemos consentir la pérdida de diversidad submarina en la isla de Tabarca; no podemos tolerar que el déficit hídrico amenace la flora del Penyagolosa».

Recordó también los dolorosos momentos vividos por las inundaciones sufridas en septiembre en la Vega Baja.

El segundo eje de su discurso fue la defensa de la totalidad del territorio valenciano. «Si no queremos ser discriminados en el conjunto de España, no podemos permitir agravios dentro de la Comunitat». Anunció que convocará en el primer trimestre del año una cumbre de territorios periféricos que reunirá a representantes de las 15 comarcas y los 62 municipios con frontera con comunidades vecinas.

El presidente se refirió además a la necesidad de reforzar la cohesión en España ya que la Comunitat lleva demasiados años sin encontrar una financiación justa.

Mensaje vacío

La presidenta del PPCV, Isabel Bonig, dijo que el discurso fue vacío y que no se centró en los problemas de los valencianos. «En España tenemos un problema territorial serio y no he oído a Puig defender la Constitución de 1978. No lo he oído quejarse por esas afirmaciones de ERC, cuando pide la independencia de unos ficticios Països Catalans».

El síndic de Ciudadanos en Les Corts, Toni Cantó, instó a Puig a prometer un acuerdo con los partidos constitucionalistas en vez del pacto verde «vacío de contenido». Además, le pidió que se alíe con otros barones territoriales del PSOE para que no se produzca el pacto con «los golpistas de ERC y los proetarras de