Valencia

«Que ETA esté derrotada no quiere decir que haya desaparecido»

Entrevista a Fernando Benzo / Escritor

Fernando Benzo ha presentado su nueva novela «Nunca fuimos héroes» de la editorial Planeta. Un libro que cuenta la vida de los policías que lucharon contra el terrorismo en España
Fernando Benzo ha presentado su nueva novela «Nunca fuimos héroes» de la editorial Planeta. Un libro que cuenta la vida de los policías que lucharon contra el terrorismo en EspañaKIKE TABERNERLa Razón

Fernando Benzo, (Madrid, 1965), fue Secretario de Estado de Cultura de 2016 a 2018 y acaba de presentar su nueva novela «Nunca fuimos héroes» de la editorial Planeta. Un libro que cuenta la vida de los policías que lucharon contra el terrorismo en España.

-¿Por qué no publicó antes «Nunca fuimos héroes»?, ¿Recibió alguna amenaza?

-Hace 20 años en lo que yo trabajé fue en un ensayo sobre la historia policial de la lucha contra el terrorismo y en aquel momento, por las circunstancias en las que vivíamos, decidí respetar la confidencialidad de algunas fuentes. Por lo que junto a la persona con la que lo escribí decidimos dejarlo en un cajón. Ahora 20 años después he decido retomar el tema, no el libro, lo que he hecho ha sido recuperar ciertas historias concretas y determinadas anécdotas que estaban en aquel libro, pero no es el mismo libro. Lo que pasaba es que a mí me daba pena que ciertas historias reales que estaban ahí no se pudieran dar a conocer, quería que la gente pudiera apreciar como era el trabajo de aquellos policías.

- Gabo y Harri son dos de los personajes principales de la novela «Nunca fuimos héroes», ¿son ficticios o están basados en algún personaje real?

-Son la suma de muchas realidades, son ficticios y son reales al mismo tiempo. No son reales en el sentido de tener nombre y apellidos, pero sí son reales en el sentido de que yo he querido recoger en ellos las voces y el espíritu de muchas personas. En la parte policial, tanto Gabo como el resto de los compañeros policías que aparecen en la misma, reflejan las diferentes experiencias vitales que hubo en la lucha contra el terrorismo.

- ¿Con qué personaje se siente más identificado?

-Al final eres comprensivo y tienes cariño por todos los que están en el lado de los buenos de la historia. A mí me gusta mucho un personaje secundario que es un comisario muy veterano, de unos 80 años que vive en una residencia, y que va a resultar fundamental para la resolución de la trama. Es de estos personajes que cuando estás escribiendo no eres consciente de cuánto van a crecer para ti como autor. Me sentía muy a gusto escribiendo sobre él.

- ¿Cómo recuerda los años más duros del terrorismo etarra en España?

-Recuerdo el enorme mazazo periódico que era, es decir, cada dos días en los peores años te despertabas con la terrible noticia de que había habido un atentado y te enterabas de cuántas víctimas habían sido. Era terrible, era la sensación de inquietud y ansiedad permanente con la que vivía la sociedad española. La verdad es que tenemos una memoria bastante frágil y se olvida bastante rápido. Pero ahora resulta difícil para alguien que no lo ha vivido que cada 48 horas España viviera un atentado terrorista.

En España todavía quedan muchas heridas por cerrar y muchas cuestiones por resolver»

- ¿Por qué en el libro no se menciona a ETA?

- No se intenta esquivar ni nada por el estilo, digamos que es una técnica para inducir sensaciones en el lector. Se habla de los malos, de la banda, pero no quería dar una identidad colectiva y dotar de una personalidad a los terroristas. Hay un terrorista, Harri, uno de los personajes más importantes de la historia, pero al resto lo que he querido ha sido restarles dignidad no dándoles ni un nombre colectivo.

- España vivió años muy duros con el terrorismo de ETA, pero ¿está ETA derrotada?

-En este país hay una cosa clara, ahora mismo no sufrimos atentados terroristas y no hay muertos de ETA y por tanto ha sido derrotada y no está actuando. Eso no quiere decir que haya desaparecido, ETA sigue estando presente en cuanto a crímenes sin resolver y criminales que no han pagado por los crímenes que cometieron y sigue viva en el debate político ya que hay gente que defiende los postulados y los objetivos que tenía la banda terrorista. Por lo tanto, hay una parte en la que hay que ser optimista ya que no estamos sufriendo el zarpazo del terrorismo, pero hay una parte en la que todavía quedan muchas heridas por cerrar y muchas cuestiones por resolver.

- Hace un tiempo salieron unos datos que decían que el 47% de los universitarios vascos no conocían a Miguel Ángel Blanco, ¿les recomendaría el libro a esos jóvenes?

-Vi esa encuesta y me resultó absolutamente demoledora. Me recorrió una sensación de lo rápido que olvidamos algo tan terrible que nos marcó a toda la sociedad. El día que lo vi me afecto de manera muy especial y si me dieran a elegir los lectores, sin duda alguna elegiría los jóvenes en general. Quiero mostrar como vivieron generaciones de policías durante años luchando contra el terrorismo, algo que esa encuesta demuestra que estamos olvidando demasiado deprisa.

- ¿Cree que se quiere evitar hablar de cierta época de España?

- Espero que no, y quien quiera evitarlo se está equivocando. Creo que es muy importante que consolidemos la memoria y el relato de lo que pasó en España durante muchos años, el pueblo que olvida sus errores está condenado a repetirlos. No tenemos que estar todo el día recordándolo, dándole vueltas a lo mismo, pero hay que tener los recuerdos muy presentes.

- Hablando de algo más reciente, ¿qué fue lo más dificil en su etapa como Secretario de Estado de Cultura?

- A mí me tocó vivir una etapa de enorme estrechez presupuestaria. Por lo tanto, gestionar políticas públicas con un presupuesto corto se hace complicado.