Joan Ribó

Fuset (Compromís) renuncia tras su imputación por homicidio imprudente

El concejal de Cultura Festiva en el Ayuntamiento de Valencia deja temporalmente sus competencias y la presidencia de Junta Central Fallera, aunque no renuncia a su acta de edil

Pere Fuset y Joan Ribó, hoy durante la rueda de prensa en la que el concejal ha presentado su dimisión
Pere Fuset y Joan Ribó, hoy durante la rueda de prensa en la que el concejal ha presentado su dimisiónlarazon

El concejal de Cultura Festiva de Valencia, Pere Fuset, (Compromís) ha anunciado este martes que abandona temporalmente estas competencias pero mantiene el acta de edil después de que el pasado viernes el Juzgado de Instrucción 18 de Valencia acordara la apertura de juicio oral contra él, otros cuatro acusados y dos empresas por homicidio imprudente en el caso de la muerte de un trabajador en los jardines de Viveros en el año 2017.

Fuset, que será sustituido en Cultura Festiva por Carlos Galiana, mantendrá la concejalía de Administración Electrónica.

En una comparecencia acompañado por el alcalde de Valencia, Joan Ribó, Pere Fuset ha dicho a los periodistas que si dejara el acta de concejal “sería imposible revertir la decisión” de dejar temporalmente las competencias, ya que está convencido de que quedará demostrada su inocencia y su objetivo es “volver con la cabeza alta y la misma energía que se merecen” la fiesta de las Fallas.

Asimismo, el juez acordó deducir testimonio por un posible delito de prevaricación contra el edil en relación a la adjudicación a la empresa que montó las gradas para los conciertos de la Feria de Julio de 2017 de la explotación de un establecimiento hostelero en las inmediaciones del lugar de celebración de los conciertos en Viveros.

En el auto, el magistrado reclamaba a los acusados como presuntos responsable de un delito contra la vida y la salud de los trabajadores y de un delito de homicidio imprudente que prestaran una fianza conjunta y solidaria de 450.000 euros para cubrir las responsabilidades pecuaniarias.

Los hechos que dieron lugar a la investigación judicial y han acabado con la decisión de Fuset de apartarse de las competencias de Cultura Festiva ocurrieron el 27 de junio de 2017 cuando un operario que trabajaba en la construcción de unas gradas con capacidad para mil personas para los conciertos musicales de la Feria de Julio pisó una tabla que se venció y cayó desde una altura de 3 metros, se golpeó la cabeza y falleció unos días después en un hospital de Valencia.

Los falleros reaccionan

Tras conocer la noticia, el presidente de la Federación de Fallas de Primera, Francisco Romero, ha declarado que la dimisión de Fuset “era una opción desde hace mucho tiempo” y que no les sorprende. "Esperemos que no afecte a las Fallas, ya que estamos en unas fechas muy cercanas para que den comienzo y solo buscamos tranquilidad. Tampoco creemos que vaya a afectar mucho a la gestión de las fiestas, ya que para eso hay una Secretaría General que es la que se encarga de gestionar todo”.

Fuset declarará el viernes

Pere Fuset se enfrentará a una citación como investigado el próximo viernes, cuando declare ante el Juzgado de Instrucción número 2 de Valencia, que instruye un caso por supuesto fraccionamiento de contratos municipales.

Fuset ya declaró en la causa por fragmentación de contratos anteriormente, pero ahora se ha ampliado la denuncia contra él. El juez ha rechazado el recurso del concejal de Compromís contra dicha ampliación y ha confirmado la citación para el próximo día 28 a las 10 horas.

La causa fue abierta hace más de un año a raíz de una denuncia de Luis Salom, asesor del grupo municipal popular en el Ayuntamiento de Valencia. La denuncia apunta a una supuesta fragmentación irregular de contratos vinculados con eventos organizados desde la Concejalía de la que era titular hasta ahora Pere Fuset, que siempre ha rechazado cualquier acusación de ir contra la legalidad.

A todo ello se suma un tercer asunto: Fuset deberá dar explicaciones en relación con posibles irregularidades cometidas en la adjudicación, a las empresas que construyeron las gradas en Viveros 2017, de la explotación de la distribución de bebidas para ese evento.

Se trata de conocer si en esa adjudicación se siguió el procedimiento adecuado y, si no se hizo, si los hechos podrían constituir un delito de prevaricación o simplemente una irregularidad administrativa. La clave del asunto es un acta de Inspección de Trabajo del Ayuntamiento que señala un posible acuerdo por el que se podría haber concedido a la empresa T-Tercios, a cambio de la construcción de las gradas de aquel evento festivo, la explotación temporal de un quiosco-bar de titularidad municipal en Viveros.