Sanidad

La hostelería valenciana tardará más en superar la crisis tras la pandemia

El sector del alojamiento y restauración es uno de los más afectados, con una caída de la demanda superior al 30 por ciento

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Vista general de la terraza de un bar de Gandia el pasado lunesNatxo FrancésAgencia EFE

Las empresas valencianas de hostelería cuentan con más de 1.000 establecimientos hoteleros y 14.824 establecimientos que prestan servicios de restauración. En su conjunto, el sector genera el 8,3 por ciento del empleo en la Comunitat (180.000 personas) y el 5,9 por ciento del PIB. Es, por tanto, uno de los sectores más relevantes para la economía valenciana, pero también uno de los más afectados por las consecuencias del COVID-19.

Aunque tiene algunas fortalezas como el atractivo del destino turístico o la calidad de su oferta, limitaciones como la falta de empresas competitivas y de dimensión, así como una baja productividad y la escasa profesionalización complican la salida de la crisis. Ante esta situación, los autores del informe del Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas (IVIE) inciden en que es necesario el apoyo a un sector con tanta relevancia, pero también con alta vulnerabilidad. Para ello, proponen acciones que combinen la superación del bache más inmediato y profundo, con medidas que faciliten la liquidez, la supervivencia de las empresas y la conservación del empleo, con otras que refuercen las estructuras organizativas, en tamaño y calidad del gobierno corporativo, para conseguir una recuperación más sólida y un refuerzo de las capacidades competitivas a largo plazo.

Un sector débil

Las restricciones a la movilidad para frenar la evolución de la pandemia han situado al sector de la hostelería (alojamiento y restauración) en una difícil posición, con perspectivas de recuperación mucho más a largo plazo que otros sectores. Aunque los problemas derivados de la caída de la demanda se dan en toda España, en la Comunitat Valenciana el sector presenta algunas debilidades que pueden complicar más la salida de la crisis.

En primer lugar, el recorte en la demanda de los servicios de hostelería en la región en 2020 será elevado, con una caída del 33,6 por ciento, por detrás de Cataluña y Baleares, según datos de Turismo Valencia. Además, para afrontar este descenso de clientes, la Comunitat Valenciana parte de un sector cuya productividad del trabajo se sitúa un 16 por ciento por debajo de la media nacional, según explican los autores del nuevo informe COVID-19: IvieExpress, Alejandro Escribá y Carlos Albert.

Utilizando datos del Observatorio GECE, los investigadores señalan también que solo el 23,7 por ciento de las empresas valencianas de alojamiento y restauración se incluyen en el grupo de las más competitivas, frente al 25,5 por ciento del conjunto nacional. El tamaño de las empresas es uno de los factores que lastran esa competitividad y también la resistencia al impacto de la pandemia.

Aunque el sector hostelero, en general, es muy pequeño -solo el 11 por ciento del empleo se genera en empresas de tamaño medio o grande-, en la Comunitat Valenciana esa atomización se acentúa, ya que las empresas grandes y medianas solo suponen el 7,2 por ciento del empleo generado por la hostelería.

Otro de los elementos que pueden dificultar la recuperación del sector es la escasa profesionalización de sus órganos de gobierno. Las empresas valencianas son, en general, menos propensas al uso del Consejo de Administración que el promedio nacional, ya que predomina el administrador único. En el caso del sector hostelero, el porcentaje de empresas que cuenta con un órgano de gobierno corporativo que aporte diversidad de perspectivas a la toma de decisiones es del 21,6 por ciento, frente al 24,2 por ciento del conjunto de las españolas.

Además, el porcentaje de los directivos de las empresas hosteleras con estudios superiores se sitúa en el 57,8 por ciento de media en España, mientras que para el conjunto de la economía alcanza el 85,1 por ciento.