Ximo Puig

El avance de la pandemia obliga a la Generalitat a reducir los aforos en bares y a confinar Elda y Petrer

Puig aumenta las medidas contra la covid y Oltra las cuestiona por ser insuficientes

El president de la Generalitat, Ximo Puig, acompañado por la consellera de Sanidad Universal, Ana Barceló (izqda), y la delegada del Gobierno, Gloria Calero, se dispone a anunciar las nuevas medidas para frenar el avance de la pandemia de coronavirus en la Comunitat Valenciana relacionadas con el cierre perimetral de municipios y con las reuniones sociales, adoptadas en la reunión de El Centro de Coordinación Operativa Integrada (Cecopi), que integran la Generalitat, la Delegación del Gobierno y las fuerzas de seguridad , .
El president de la Generalitat, Ximo Puig, acompañado por la consellera de Sanidad Universal, Ana Barceló (izqda), y la delegada del Gobierno, Gloria Calero, se dispone a anunciar las nuevas medidas para frenar el avance de la pandemia de coronavirus en la Comunitat Valenciana relacionadas con el cierre perimetral de municipios y con las reuniones sociales, adoptadas en la reunión de El Centro de Coordinación Operativa Integrada (Cecopi), que integran la Generalitat, la Delegación del Gobierno y las fuerzas de seguridad , .Juan Carlos CárdenasAgencia EFE

Las nuevas medidas restrictivas para frenar la evolución de la pandemia se centran en la reducción de los aforos máximos permitidos en todos los establecimientos e impone nuevas limitaciones en las celebraciones hasta el próximo 9 de diciembre.

Además, desde las doce de la noche de hoy y hasta dentro de 14 días, los 90.000 habitantes de Elda y Petrer no podrán salir de su localidad, salvo causas justificadas como ir a trabajar, estudiar o al médico.

El cierre perimetral de la Comunitat Valenciana se mantendrá, al menos, hasta el próximo 14 de noviembre. Es decir, se prolongan así los siete días previstos inicialmente.

La hostelería seguirá abierta, pero se limita su ocupación a un tercio en el interior de los locales y al 50 por ciento en la terraza. Los pubs y discotecas seguirán cerrados.

Los comercios y mercadillos tendrán un aforo de un 50 por ciento- estos últimos podrán ampliar el espacio que ocupan para mantener los puestos habituales y se estudiará permitir un aforo mayor en los supermercados, por tratarse de un bienes de primera necesidad.

En los velatorios está autorizado un tercio del aforo, con un máximo de 25 personas al aire libre y 15 en espacios cerrados, en las celebraciones religiosas y no religiosas también se impone un tercio de la ocupación habitual.

Por lo que respecta a los eventos deportivos «sin excepción» serán sin público y el aforo de cines y teatros se reduce a la mitad. En aquellas localidades en los que los parques infantiles sigan abiertos, se limita también el aforo al aire libre a la mitad.

Las medidas adoptadas no cuentan con el visto bueno de todo el Gobierno valenciano. La vicepresidenta y portavoz del Consell, Mónica Oltra, las cuestionó apenas media hora después de que el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, explicase a los medios de comunicación por qué se consideran ajustadas a la situación de la Comunitat Valenciana.

«No hay que perder la perspectiva, ya que en estos momentos las personas hospitalizadas con covid son el 60 por ciento de las ingresadas en el peor momento de la pandemia, y el 57 de las que había en la UCI en el pico de la primera ola. Contemplamos todas las medidas, pero no podemos saltarnos fases ni actuar de manera compulsiva, dijo Puig.

Sin embargo, Oltra defendió que se deben limitar más los «espacios de sociabilidad», que es donde se dan la mayoría de brotes para evitar un nuevo confinamiento total y poder garantizar la educación presencial. Lleva toda la semana dando su posición sobre este asunto, aunque no se le ha tenido en cuenta.

Por su parte, la consellera de Sanidad, Ana Barceló, admitió que se encuentra en un escenario de transmisión comunitaria sostenida y generalizada del virus, con «presión creciente» sobre el sistema sanitario.