La Guardia Civil de Castellón deja de hacer traslados de presos por el mal estado de los vehículos

La Guardia Civil se ha visto forzada este fin de semana a cancelar todos los traslados de reclusos del centro penitenciario Castellón II (Albocàsser) ante el mal estado de los vehículos habilitados al respecto.

Desde el sindicato Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC), que han alertado en las últimas semanas sobre la necesidad de actualizar de forma urgente la flota de la Comandancia de Castellón, lamentan la falta de medios en la prisión, cuyos cinco vehículos adaptados para el traslado de internos se encuentran en estos momentos en el taller por distintas averías.

El centro penitenciario cuenta, según las mismas fuentes de AUGC, con cinco vehículos: tres furgonetas con capacidad para trasladar a seis reclusos y dos coches mampara con capacidad para dos internos; estos vehículos realizan el traslado de hasta ocho reclusos diarios a Juzgados o a centros médicos, por ejemplo. La prisión Castellón II alberga a cerca de 1.500 internos.

Ante la falta de disponibilidad de ninguno de los cinco vehículos, el Instituto Armado “ha tenido que cancelar los traslados, que por fortuna no eran urgentes, del fin de semana”, comentan fuentes de AUGC.

Las mismas fuentes confirman que el servicio de traslados se ha podido retomar este lunes a través de uno de los dos autobuses de la Comandancia, “pero ha tenido que ser necesaria la contratación urgente de un conductor de la ciudad de Castellón, ya que dos de los conductores habituales se encuentran de baja, otro está de vacaciones y el único activo no se encontraba disponible”, explican.

El sindicato reclama al Ministerio del Interior la adquisición de nuevos vehículos en la provincia y se muestra muy crítico con los elevados gastos de mantenimiento de la flota actual —se destinan más de 400.000 euros anuales en reparaciones—, “especialmente si se tiene en cuenta que la mayoría de vehículos fueron adquiridos entre 2008 y 2012, acumulan una media de 400.000 kilómetros y requieren cerca de 8.000 euros al año en mantenimiento”.