Compromís pide generar energía en los terrenos de los 35 puertos de la Generalitat

El grupo Compromís en Les Corts Valencianes ha propuesto estudiar la viabilidad de la generación de energía en lo que denominan terrenos «sellados» es decir, aquellos que ya están en uso y donde la instalación de la infraestructura necesaria no supondría impacto mayor sobre el territorio, para evitar de este modo que una actividad a todas luces positiva como es la generación de energía por medios no contaminantes tenga el daño colateral del impacto sobre el territorio, como es el caso de las plantas fotovoltaicas de nueva creación.

Y entre estos terrenos ya utilizados, Compromís propone los 35 puertos de titularidad de la Generalitat, como son, entre otros, los de Altea, Calpe, Denia, Cullera, El Perelló, Oropesa, Puebla de Farnals o Peñíscola.

El estudio propuesto deberá valorar la viabilidad técnica y económica del dimensionado de los proyectos para la instalación de estructuras para la generación de energía renovable, prestando especial atención a la energía fotovoltaica, la eólica y la energía de las olas, en las instalaciones, terrenos sellados y aguas de los puertos de la Generalitat, y teniendo en cuenta los condicionantes ambientales y paisajísticos que les sean de aplicación.

Por un principio de proximidad, el destino de la electricidad generada será prioritariamente al autoconsumo de los edificios y servicios públicos próximos al lugar de generación, así como garantizar el derecho a la energía a los colectivos vulnerables, y a impulsar comunidades energéticas locales e iniciativas energéticas de economía social.

Explican desde la formación nacionalista que la dependencia de los combustibles fósiles de la sociedad actual es un peligro para nuestro futuro, ya no solo para la economía, sino también para nuestra forma de vida. La Comunitat Valenciana será una de las zonas más afectadas por el cambio climático en Europa. Será así la zona cero europea de la crisis climática y se verán afectadas por la subida del nivel del mar hasta final de este siglo las zonas más pobladas de nuestro territorio.

Por ello, la diputada Graciela Ferrer considera que hay que combatir los efectos devastadores de la actual crisis climática al mismo tiempo que encaramos las soluciones para la crisis energética actual, avanzando hacia la independencia energética de nuestro territorio y apostando por las fuentes de energía de las que disponemos, las energías renovables.

Continua la diputada que «hay que abrir el espectro a las múltiples posibilidades que nos ofrecen las energías renovables: tenemos mucha superficie construida susceptible de ser cubierta por placas fotovoltaicas. Se pueden estudiar muchas zonas, también en el mar, para instalar aerogeneradores, pero hay otras posibilidades menos utilizadas que han dado buenos resultados en otras latitudes, como por ejemplo la energía de las olas (undimotriz), la energía que podemos obtener de las olas del mar».

Si profundizamos en esta idea de usar áreas de territorio ya sellado para la generación de energía, podemos pensar en los treinta y cinco puertos de los que dispone la Generalitat, cada uno de ellos con una configuración y casuística concreta, y que suponen en algunos casos unos terrenos ideales para la instalación de plantas de generación de energía, tanto respecto a energía solar, como eólica o la energía de las olas.

La mayoría de los 35 puertos que posee la Generalitat son de escaso tamaño y destinados tanto al amarre de pequeños barcos de pesca como a la náutica deportiva y suelen ser zonas protegidas en las que no hay oleaje.