Cultura

Lorenzo Aguirre, el pintor de la playa del Postiguet, regresa a Alicante

Los familiares del artista donan al Museo de Bellas Artes su legado, 115 obras que estaban en Madrid

Hoy se ha materializado la entrega del legado de Lorenzo Aguirre al Museo de Bellas Artes de Alicante, que depende de la Diputación.
Hoy se ha materializado la entrega del legado de Lorenzo Aguirre al Museo de Bellas Artes de Alicante, que depende de la Diputación.La Razón

Dice la escritora Francisca Aguirre (Alicante; 1970-Madrid; 2019) en su poema “Testigo de excepción” que solo necesita el mar, y el mar de ese poema es el que pintaba su padre, Lorenzo Aguirre (Pamplona; 1882-Madrid; 1942), el de Alicante, el de la playa del Postiguet. “Un mar, un mar es lo que necesito. Un mar y no otra cosa, no otra cosa. Lo demás es pequeño, insuficiente, pobre”, reza el poema. Y ese mar ha regresado ahora a Alicante, gracias a la donación de la colección del artista que han realizado al Museo de Bellas Artes de Alicante, Mubag, sus familiares. Ella, Francisca Aguirre, más conocida como Paca, observaba cómo su padre pintaba esa playa.

Todas las obras estaban en Madrid, en el barrio de Chamberí para ser exactos. Aunque nació en Pamplona, Lorenzo Aguirre se fue a vivir a Alicante con apenas tres años; por eso, los paisajes de la costa de la provincia salen en sus obras. Tal y como han relatado hoy tanto la técnico del Mubag, María Gazabat, como el escritor y amigo de la familia, José Luis V. Ferris, Aguirre era un artista polifacético y, de hecho, se le considera uno de los fundadores de las Hogueras de San Juan, las fiestas mayores de la ciudad. Esto es así porque es el autor de los tres primeros carteles de las fiestas, y en 1928 montó la primera Hoguera en la entonces plaza de Santa Isabel que ahora se llama plaza de Gabriel Miró.

Al acto para materializar la entrega del legado del artista -que ha tenido lugar en el Mubag- han asistido también el director del museo, Jorge A. Soler, y el diputado de Cultura, Juan de Dios Navarro.

Entre los cuadros donados -que se expondrán el próximo año en el Mubag- hay escenas íntimas, un lienzo dedicado a su madre, otros en los que pinta a sus hijas y, por supuesto, paisajes en los que inmortaliza la costa alicantina así como dibujos satíricos. Ya en 2021, y como parte de una exposición de Emilio Varela (Alicante, 1887-1951), algunos cuadros de Aguirre se exhibieron en el museo.

Ahora ha vuelto y a lo grande. En total, la colección, que se ha mantenido unida e intacta desde el fallecimiento del artista, hace más de ochenta años, consta de 115 obras, de las cuales 39 son pinturas, 73 dibujos -la mayoría de ellos humorísticos-, dos carteles publicitarios y un cuento ilustrado. Además, incluye una decena de objetos personales de Aguirre como un caballete, una paleta, dos cámaras de fotos y seis diplomas.

Para la Diputación de Alicante es un orgullo recibir esta donación que va a hacer más grande el patrimonio cultural de nuestra provincia y del propio Mubag. Por ello, vamos a tratarla como se merece, con exquisitez y con el mayor cariño posible, vamos a restaurarla y vamos a acercarla a todos los alicantinos”, ha señalado Juan de Dios Navarro, quien ha agradecido a la familia este gesto solidario “que nunca olvidaremos”.

Uno de los momentos más emotivos de la entrega de la obra del artista ha sido protagonizado por Ignacio Grande, familiar de Aguirre, que ha velado por el patrimonio del pintor durante años. Muy emocionado, Grande ha destacado que es motivo de “felicidad” haber logrado que la obra de Lorenzo Aguirre esté en el Mubag, “cumpliendo de esta forma el deseo de su hija Paca, mi cuñada”.

Según ha explicado la técnico María Gazabat, ​​“las obras de arte se encuentran fechadas entre 1904 y 1942, año de su fallecimiento en la cárcel de Porlier (Madrid), y la mayoría están realizadas al óleo, aunque también hay acuarelas y carboncillos en soporte papel”, ha explicado Gazabat. De todas ellas, la pintura más temprana es una tabla al óleo de pequeño formato con un paisaje de palmeras fechada en 1904 y, de las más tardías, una acuarela sobre papel de 1941 en la que se representa a San Fermín.

Dibujo satírico

Además de por su pintura, Aguirre destacó por su satírico dibujo que ilustró las revistas humorísticas de la época con las que colaboró a partir de 1914, durante su estancia en Madrid. Las caricaturas de las actrices María Guerrero, Consuelo Hidalgo y la Preciosilla, entre otros rostros femeninos, reflejan la frescura y la renovación plástica de este artista. En la colección sobresale una tira satírica compuesta por cincuenta y cinco viñetas en las que se mofa de lo que acontece tanto en su país como en el mundo.

Y entre los dibujos se encuentran dos bocetos preparatorios de un proyecto que desarrolló en 1931 con destino a la decoración del techo del salón de actos de la Diputación de Alicante, que finalmente no se ejecutó.

Sus cuadros de paisajes se engloban en dos grupos; los ejecutados entre 1920 y 1930 de la costa alicantina, entre los que destacan los dedicados a Moraira, al óleo y en un formato medio; y los realizados entre 1939 y 1940 en su exilio francés, tras la Guerra Civil Española, en la ciudad francesa de Le Havre. Por su parte, con los retratos el autor acerca al público su obra más íntima al inmortalizar a su estimada familia y a él mismo en un autorretrato a la edad de 45 años.

Ahora que ya está en casa, en Alicante, si bien habrá que esperar a 2025 para que la totalidad de la colección de Lorenzo Aguirre se exhiba en una muestra temporal, de la que serán comisarios María Gazabat y José Luis V. Ferris.