Los mercados de abastos de Alicante se reinventan

Los Mercados de Alicante cada vez tienen una oferta gastronómica mayor y más variada. A los puestos de venta de frutas, verduras, carne o pescado se suman en los cuatro mercados municipales de la ciudad -Mercado Central, Babel, Benalúa y Carolinas- bares y restaurantes que complementan la oferta y son en sí mismos un reclamo para los turistas. De hecho, cada día más personas optan por acudir a los mercados única y exclusivamente para disfrutar de establecimientos gourmet para comer productos y género fresco de primer nivel con una gran variedad y opciones de calidad.

En los últimos meses se han ampliado los puestos de restauración con la apertura de nuevos locales, restaurantes y bares para ir a vivir una experiencia donde se puede degustar producto local fresco, marisco de primer nivel, tapas de calidad, comida tradicional, japonesa o mejicana con una amplia variedad de productos que merece la pena probar.

Se trata de un nuevo resurgir de los mercados municipales, de un impulso para que alicantinos y visitantes tengan otra razón para comprar en ellos. Tal y como explicó el presidente de la asociación de Comerciantes de los Mercados, Paco Alemañ, «se está ampliando la oferta de hostelería y esto va acompañado del gran resurgir que están teniendo los cuatro Mercados de Alicante y por lo que estamos tan satisfechos. Hay una creciente oferta y es cada vez más la gente que acude como un complemento, no solo a realizar compras, también a tomarse una tapa o a quedarse a comer».

El número de puestos nuevos que se abren es cada vez mayor; de hecho, el Ayuntamiento sacó la concesión de nuevos puestos con una convocatoria histórica, con la que concretamente se lograron abrir un total de 55 nuevas unidades comerciales en Carolinas, Central, Benalúa y Babel.

Para la concejala de Mercados y Comercio, Lidia López, es muy positivo «el resurgir de nuestros Mercados municipales que en los últimos años han evolucionado y experimentado un proceso de adaptación y cambio muy importante, y viven actualmente su mejor momento con un incremento de ventas y apertura de nuevos puestos».

En los Mercados alicantinos se pueden degustar actualmente las mejores tapas, alcachofas confitadas, tabla de ibéricos, marisco fresco y recién comprado, así como una gran variedad de productos ibéricos, rabo de toro, ostras aliñadas, marinera japonesa, o bocadillos.

Edificio emblemático

Si hay un mercado que sobresale por encima de todos es el Mercado Central, ubicado en la avenida de Alfonso X el Sabio, una de las arterias principales de la ciudad, tanto por su tamaño como por ser un icono de la ciudad. Se trata de un edificio que ha cumplido 100 años; en concreto, se inauguró el 12 de noviembre de 1922, mucho después de que el rey Alfonso XIII pusiera la primera piedra el 12 de febrero de 1911.

Su arquitectura es uno de sus elementos clave y sigue conservando su esencia y razón de ser, el de ser la plaza de abastos por excelencia de la ciudad. Este mercado fue proyectado por el arquitecto Francisco Fajardo en 1915, pero llevado a cabo por Juan Vidal Ramos en 1922. Su estilo es ecléctico y llaman la atención sus elementos ornamentales modernistas. Por encima de su valor monumental está el trasiego de gente que ya sea para comprar en los puestos, tomar una tapa va por allí.