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El supuesto Caravaggio inicia su ratificación como Bien de Interés Cultural con pronóstico favorable

Representantes del Museo del Prado, la Academia de Bellas Artes de San Fernando y la Comunidad de Madrid se han reunido para iniciar la tramitación del cuadro “durmiente”
La RazónLa Razón

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Cuando ha transcurrido casi un mes desde el “hallazgo” del supuesto Caravaggio, el “Ecce Homo” propiedad de la familia Pérez de Castro que se iba a subastar el pasado 8 de abril, la Comunidad de Madrid, a través de la Consejería de Cultura y Turismo, ha iniciado la tramitación del expediente que, previsiblemente, terminará con la declaración oficial del óleo como Bien de Interés Cultural. Hasta el momento solo goza de una protección cautelar, pendiente del informe final y público de los estamentos especializados, que impide que se pueda subastar o sacar del territorio nacional.
En la reunión periódica del Consejo Regional de Patrimonio Histórico de la Comunidad de Madrid, celebrada hace unos minutos, representantes de la administración pública, de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando y del Museo del Prado, han informado de la situación de la pintura y consideran “favorable” la información sobre la tramitación del expediente. Este paso burocrático, aunque todavía mínimo, asegura la protección del cuadro y, en teoría y según esperan todas las partes, acabará con la ratificación del mismo como una obra de Caravaggio. De hecho, según ha podido saber este diario, parece que, de momento, existe bastante consenso para definir esta pieza como «atribuible» a Caravaggio, que no es igual que darlo por atribuido, conclusión para la que todavía faltan dar muchos pasos, ahondar en algunas pruebas técnicas y someterlo a distintas pruebas, aunque parecer ser que cada vez quedan menos dudas. De momento este lienzo continúa gozando de todas las garantías y la protección apropiada para evitar que salga al extranjero, como ya pasó con anterioridad con otra tela de este pintor, un recuerdo que todavía muchos tienen presente y que ha animado en esta ocasión a que todas las partes implicadas actúen de mutuo consenso y decisión.
“La coronación de espinas”, como estaba catalogado el cuadro antes de que se alertara por parte de la casa de subastas Ansorena al Ministerio de Cultura, permanece ahora en las dependencias de la empresa especializada SIT, bajo estrictas medidas de seguridad y en el municipio madrileño de Coslada, como desvelaban varios diarios esta misma mañana. Según explicó antes de desvelarse el punto exacto Jorge Coll, el responsable de Colnaghi (empresa custodia de la ratificación final del cuadro) a LA RAZÓN, el cuadro permanecerá en esta ubicación hasta que termine el proceso burocrático y la familia tome una decisión respecto al destino de la obra.
En lo que también parece existir cierto consenso es que la tela necesita una limpieza, que cuenta con repintes no demasiado afortunados y que su conservación no es precisamente la más óptima. A pesar de eso, parece que la huella del pintor, sea Caravaggio o no, permanece con fuerza sobre ella. Todavía no existe una fecha concreta para que el cuadro sea analizado bajo el prisma de unas pruebas científicas que despejen definitivamente todas las dudas.
En la misma reunión del órgano autonómico, se sometieron al mismo inicio del trámite los expedientes para declarar como BIC las fiestas patronales de San Isidro, la Iglesia de Nuestra Señora de las Nieves de Manzaneras el Real y los entornos de protección del Real Oratorio del Caballero de Gracia, de la Iglesia del Monasterio de Benedictinas de San Plácido y del Palacio Bauer.