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Reaparecen misteriosamente dos cuadernos de notas de Darwin perdidos hace 22 años

Con el mensaje “Bibliotecaria, Felices Pascuas X” escrito en la solapa de un sobre un anónimo, recibió este par de regalos inesperados la universidad de Cambridge
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La Razón
  • Sofía Campos

    Sofía Campos

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El envoltorio era lo suficientemente llamativo como para no adivinar la sorpresa de su contenido. En una bolsa de regalo de color rosa brillante que contenía la caja azul original reposaban un par de cuadernos de notas escritos por Charles Darwin que han sido devueltos a la Universidad de Cambridge de forma anónima, 22 años después de haber sido vistos por última vez. Los pequeños libros encuadernados en cuero incluyen el bosquejo del “árbol de la vida” del científico. La biblioteca de la Universidad había hecho un llamamiento mundial para encontrarlos, tal y como recoge la BBC. Además de las características mencionadas del “packaging” del misterio también había un sobre marrón en el que estaba impreso el mensaje: “Bibliotecario, Felices Pascuas”.
Los blocs de notas datan de finales de la década de 1830, después de que Darwin regresara de las Islas Galápagos. En una página, dibujó un esbozo de un árbol que inspiró su teoría de la evolución y más de 20 años después se convertiría en una teoría central en su innovador trabajo ‘El origen de las especies’. “La teoría de la selección natural y la evolución es probablemente la teoría más importante en las ciencias ambientales de la vida y la tierra, y estos son los cuadernos en los que se compuso esa teoría”, dice Jim Secord, profesor emérito de historia y filosofía de la ciencia en la universidad. Los manuscritos fueron vistos por última vez en noviembre de 2000 después de una solicitud interna para sacarlos de la cámara acorazada de colecciones especiales de la biblioteca para ser fotografiados.
Fue solo durante un control de rutina dos meses después que se descubrió que faltaban. Inicialmente, los bibliotecarios pensaron que los habían vuelto a colocar en el lugar equivocado en la gran biblioteca universitaria, que contiene más de 10 millones de libros, mapas y manuscritos. Pero a pesar de varias búsquedas, los cuadernos nunca aparecieron y, en 2020, se concluyó que probablemente habían sido robados y se informó a la Interpol.