MPM

La obsesión común a Almodóvar, Bacon y Koons: Picasso

Málaga inaugura el inevitable "eco" del genio en todos los artistas que le sucedieron, y que también le cuestionaron

MÁLAGA, 02/10/2023.- La obra Femme assise dans un fautuil, de Picasso, expuesta en el Museo Picasso de Málaga, dentro de las actividades conmemorativas del 50 aniversario del fallecimiento del artista, la exposición temporal "El eco de Picasso", comisariada por Eric Troncy. EFE/Álvaro Cabrera
"El eco de Picasso" estará en el MPM hasta el 31 de marzo de 2024Álvaro CabreraAgencia EFE

Advierte Eric Troncy que esto no es una exposición de Picasso, sino «de arte contemporáneo». Va de cara el comisario «para no decepcionar» a nadie que traspase las puertas del Museo Picasso Málaga (MPM). Y una vez sabida la «trampa» de la exposición (El eco de Picasso), por decirlo de algún modo, el resto es entregarse a los nombres, que no son pocos, que se van sucediendo. Picasso, claro, pero al genio se suma más de medio centenar de artistas con un denominador común: en algún momento de su carrera le cuestionaron, «admitieron haber mirado a Picasso», explica Troncy de los Bacon, Basquiat, Bourgeois, Koons, Saura e incluso Pedro Almodóvar, de quien Jorge Galindo ha intervenido una de sus fotografías.

Con la sinceridad por bandera, Troncy presenta el recorrido como una extensión de sus propias fantasías: «Es una exposición sobre el placer; y es imposible no emocionarse delante de un Picasso o de un Bourgeois». Pero las paredes del museo no solo recogen las obsesiones del comisario, sino de todos los creadores presentes, algunos con obras «por encargo» para la ocasión. Porque con Picasso no hace falta ser consciente de estar pensándolo, él ya está ahí. Es parte del ADN de hoy. «Hablamos de influencias que están en la mente», dice Troncy ante obras en las que el peso de Picasso es indiscutible, como la Vaca bucólica, de Tursic & Mille, que recibe al visitante o el acrílico de Genieve Figgis sobre Downtown Abbey.

Hasta el 31 de marzo de 2024 estará este eco picassiano en el MPM como muestra del amplio abanico que cultivo el artista. Porque no son solo pinturas lo que se puede encontrar en la muestra, sino también mucha escultura de diferentes materiales que dan muestra de toda esa influencia que tuvo en el arte del siglo XX y que perdura en el XXI. Además del Cubismo, su principal contribución al arte moderno fue «la libertad que caracteriza cada aspecto de su pintura, escultura y obra gráfica», presentan: «Existe un consenso generalizado respecto al profundo impacto que Picasso ha producido en el mundo del arte, lo que permite afirmar que no ha habido ningún artista anterior a él que tuviera un seguimiento masivo de seguidores y admiradores, así como de críticos».

El eco de Picasso ofrece la posibilidad de profundizar en el arte contemporáneo a través del diálogo que artistas de todo el mundo han establecido con la obra y figura de Pablo Ruiz Picasso; una conversación dada «en tiempo real» (durante la vida del artista), o bien en la época contemporánea.

De ayer y de hoy

Por una parte, se presenta la obra de Picasso junto a la de artistas que reconocieron su influencia en sus trabajos, como Francis Bacon, Maria Lassnig, George Condo o Martin Kippenberger; mientras que, por otra, se exponen a artistas contemporáneos como Claire Tabouret, Rashid Johnson, Brian Calvin o Farah Atassi, 17 de los cuales han creado sus obras expresamente para la ocasión y que serán expuestas por primera vez.

Entre las 85 obras presentes en la exposición, 18 son del propio Picasso, destacando especialmente el lienzo de gran formato La masacre de Corea (del Musée Picasso de París), que no visitaba España desde hace quince años. Así, la exposición se basa precisamente en ese efecto de las prácticas artísticas del malagueño en la contemporaneidad y, sobre todo, en la actualidad artística globalizada.

En boca de Troncy, El eco es una muestra «poética y salvaje» que, más allá del valor de su protagonista, está avalada por el currículo y las «obsesiones» de un comisario que es crítico de arte y responsable de más de una centena de exposiciones monográficas en el centro de arte Le Consortium, en Dijon, del que es codirector. En su texto curatorial afirma que la singularidad de esta cita obedece a que «explora la extraordinaria presencia de Picasso en nuestro imaginario» y por la «profunda huella que habría dejado su constante búsqueda de nuevas formas de expresión artística sobre las inquietudes de las generaciones más recientes».

Por su parte, Michael FitzGerald, catedrático de Historia del Arte en el Trinity College de Hartford, en el catálogo de esta exposición corrobora que «Picasso reivindicó sin descanso esta libertad absoluta como artista. Quizá ese sea su eco más perdurable».

  • Dónde: Museo del Prado. Madrid. Cuándo: hasta el 31 de marzo. Cuánto: desde 8 euros.