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Estreno

Crítica de "Alpha": polvo seremos ★★

Dirección y guion: Julia Ducournau. Intérpretes: Golshifteh Farahani, Tahar Rahim, Mélissa Boros, Emma Mackey. Música: Jim Williams. Fotografía: Ruben Impens. Francia, 2025. Duración: 128 minutos. Drama.

Un fotograma de "Alpha"
Un fotograma de "Alpha"Imdb

En “Alpha” el ‘body horror” es más prosaico que en “Crudo” o “Titane”. El plano detalle de una aguja penetrando la piel de un brazo, la prueba encarnada de un cuerpo convertido en un mapa de heridas y cicatrices, será el ‘leitmotiv’ de una película que evoca la aparición del SIDA disfrazando al virus de una enfermedad distópica, que nos convierte en mármol para luego devolvernos al polvo que siempre fuimos.

Volvemos a temer al cuerpo como origen y fin de nuestras desdichas, ahora metáfora post-COVID no demasiado sutil de una adolescencia que nos abre al mundo, y con él a sus mezquindades: cuando Alpha, que se ha tatuado con una aguja que puede o no estar infectada del virus marmóreo, sangra espontáneamente en clase, sus compañeros, incluso su novio, la tratan como a una apestada. Pero la película, a pesar de insistir en el valor simbólico de la enfermedad como signo inequívoco de una otredad incomprendida por la rigidez de lo normativo, no parece tratar sobre la discriminación o el rechazo social, o no únicamente sobre eso.

Tal vez el problema más grave de “Alpha” es que no sabe muy bien de lo que trata. Quizás sea un filme sobre los fantasmas de la adicción, la más literal (la heroína) y la más tóxica (el amor loco de los lazos de sangre). Podría ser una secuela de “Junior”, el memorable corto de Ducournau sobre el ‘coming of age’ como metamorfosis dermatológica. Es, definitivamente, un melodrama familiar, muy preocupado por la herencia y la filiación (como “Crudo”), y en la que el triángulo afectivo formado por dos hermanos (ella, la cuidadora; él, el cuerpo doliente) y la chica del título, hija y sobrina de ambos, absorbe toda la energía de una trama tediosa y con tendencia a la redundancia. Si por algo recordaremos “Alpha” es por sus poéticos, bellos cuerpos de mármol, testigos ciegos de una película de ideas petrificadas.

Lo mejor:

El virus que convierte a los humanos en estatuas ofrece imágenes poderosas.

Lo peor:

Dispara sin rumbo, y a veces parece una película de una sola idea que no acaba de evolucionar.

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