«First Man»: Houston, tenemos un problema de taquilla

¿De la Luna a la tierra en caída libre? Es pronto para aseverarlo sin medias tintas, pero está claro que la trayectoria de «First Man», una de las cintas más esperadas del año, no apunta en la mejor dirección.

¿De la Luna a la tierra en caída libre? Es pronto para aseverarlo sin medias tintas, pero está claro que la trayectoria de «First Man», una de las cintas más esperadas del año, no apunta en la mejor dirección. En su fin de semana de estreno en Estados Unidos, la cinta de Damien Chazelle protagonizada por Ryan Gosling, un «biopic» sobre Neil Armstrong, el primer hombre que puso un pie en la Luna, solo recaudó 16 millones de dólares. Aunque puede sonar a mucha «pasta», la realidad es que es un arranque peor que cintas del espacio como «Gravity» o «The Martian» y solo ha podido colocarse en el puesto número tres del ránking de producciones más taquilleras del último fin de semana. Es más, «First Man» no ha logrado desbancar a dos filmes que se estrenaron la semana anterior, «Ha nacido una estrella» (que se surte del efecto Lady Gaga) y «Venom», que completaron, respectivamente, un «box» de 28 y 35 millones de dólares.

En España, la cosa tampoco fue como se esperaba para el nuevo trabajo del director de «La La Land», el exitazo de hace un par de años que puso las expectativas en torno a Chazelle en la Luna y más allá. La película entró en el cuarto lugar de la taquilla, con 900.000 euros. Por delante, «La casa del reloj en la pared», «Smallfoot» y la inevitable «Venom», el nuevo «pelotazo» de la factoría Marvel. En total, «First Man» suma 30 millones de dólares de recaudación mundial, lejos aún de los 60 que costó la producción. Es muy probable que la cinta recupere dicho dinero, pero ¿logrará ser solvente con creces? Por ahora no hay indicios de que el «biopic» de Neil Armstrong vaya a ser un fenómeno, y de hecho, la cercanía de Halloween, con los estrenos asociados a este nicho de temporada, pueden hacer que su progresión se ralentice ostensiblemente.

En Universal han querido curarse en salud y advertir que «First Man» es una cinta de largo aliento, no una de esas que rompe la taquilla en la primera semana y luego desaparece. Son conscientes de que una buena suma de nominaciones a los Oscar puede relanzarla y, en principio, con críticas favorables en Estados Unidos (no tanto en Europa) es posible pensar que el filme de Chazelle tendrá cabida en la carrera por las estatuillas.

Pero, ¿a qué se debe este mal arranque? Como siempre en estas cosas, el público es soberano e interpretar sus decisiones es un trabajo complicado, sino estólido. Pero hay varios puntos interesantes en este sentido. En primer lugar, la coincidencia en el tiempo con otro producto de la todopoderosa factoría Marvel. Quizás Universal subestimó el poder de «Venom», que se estrenaba una semana antes, al tratarse de un superhéroe debutante menos conocido, pero llegados a este punto Marvel está más que asentado en el corazón de los espectadores, que acuden en masa a cada uno de sus estrenos. Junto a ellos, una invitada especial, Lady Gaga, que debuta en el cine como coprotagonista junto a Bradley Cooper de «Ha nacido una estrella». El encanto de esta pareja se ha comido el interés por la vida y milagros del primer americano en la Luna.

Y luego, y no menos importante, está el factor político (involuntario seguramente) de «First Man». Desde su presentación en el Festival de Venecia, muchos advirtieron una omisión capital en la cinta: el momento en el que Armstrong y Aldrin plantan la bandera americana en la Luna no aparecía. Los republicanos, empezando por Trump, pusieron el grito en el cielo y tildaron a la película de «antipatriota». Hasta el propio Aldrin les afeó el olvido en Twitter. Las explicaciones de Ryan Gosling y Damien Chazelle no han convencido y es muy posible que en buena parte del público norteamericano haya calado la idea de que «First Man» no es una narración suficientemente «americana» de un hecho tan incardinado en la conciencia patriótica del país. Eso sumado a la alergia por la épica evidente y gruesa, muy del gusto del público, de una cinta que se centra más en el retrato íntimo del astronauta, está lastrando su arranque.

¿Remontará «Fist Man»? ¿Alcanzará la Luna? Se antoja difícil, pero no imposible. Como muestra un botón. «La La Land», el fenómeno de 2016, arrancó su primer fin de semana en el puesto 15 del ránking, con solo 800.000 dólares en Estados Unidos. A partir de ahí fue creciendo imparablemente hasta sumar 446 millones de dólares en todo el mundo. Había costado solo 30. Pero, claro, por entonces la apuesta de «La La Land», que ahora se antoja un éxito obvio, era arriesgadísima: Chazelle solo tenía un filme a sus espaldas, la minúscula «Whiplash», y el género musical era un vestigio del pasado. Ahora, «First Man» tiene las altas expectativas en contra y ya se sabe que, a menudo, cuanto más se espera de algo, más posibilidades hay de sentirse decepcionados.