Libros

El oráculo de Houellebecq para la Francia de Macron

Desde que publicó «Sumisión» (2015) el mismo día que se produjeron los atentados en «Charlie Hebdo», se le atribuyen dotes adivinatorias. ¿Qué predice su nueva novela?

Michel Houellebecq, durante una visita a Barcelona en 2019
Michel Houellebecq, durante una visita a Barcelona en 2019larazon

Cada lanzamiento de Houellebecq se convierte en todo un acontecimiento en Francia, y esta vez no ha sido una excepción. «Anéantir» («Aniquilar») acaba de aparecer hace unos días en las librerías haciendo mucho ruido en un momento de efervescencia política en el país, a poco más de tres meses de las elecciones presidenciales y con Michel Houellebecqejerciendo de nuevo de visionario capaz de situarse en 2027 con un análisis pormenorizado de lo será el próximo quinquenio en Francia. Así, según la nueva novela de Houellebecq, haciendo de particular oráculo de la Historia contemporánea, Macron llega a ese año tras su segundo mandato. El presidente francés no es nombrado en el volumen, pero su figura es perfectamente reconocible en las 734 páginas que contiene la octava novela del polémico autor que aparece tres años después de «Serotonina» como la gran creación literaria de este arranque de 2022 en Francia y de la que la crítica ya ha coincidido en destacar su estilo rápido y eficaz en esta mirada sociológica sobre el mundo actual en la que el lector encontrará los temas recurrentes de su narrativa: el vacío espiritual de Occidente entregado a la alienación consumista, las sectas, la miseria sexual, la decrepitud y la mercantilización de los cuerpos.

¿El fin de la izquierda?

Tomando la máquina del tiempo del autor y situándonos en el escenario político de dentro de cinco años, la izquierda es algo residual prácticamente inexistente en ese 2027 y la extrema derecha sigue fuerte. «Anéantir» se centra en la figura de Paul Raison, un asesor político de 49 años que trabaja para la mayoría presidencial de Macron. Su faceta laboral contrasta con una profunda crisis existencial sumido asimismo en una larga crisis matrimonial y por su gusto consciente por una comodidad burguesa que en el fondo le hace infeliz. Paul Raison es en concreto el asesor principal del ministro de Economía, Bruno Juge. Y aquí Hoellebecq vuelve a jugar con la actualidad, puesto que sin nombrarlo se da por descontado de la reencarnación en ese personaje del actual ministro de Economía galo, Bruno Le Maire. Lo cierto es que Houellebecq y Le Maire mantienen una íntima amistad en la vida real y el novelista recrea éxitos futuros de su amigo ministro como la nacionalización de la marca automovilística Citroën, símbolo de la automoción del país. Houellebecq jugando a Houellebecq. Pero no se acaban aquí las predicciones. El autor describe un 2027 donde el terrorismo islamista ha perdido fuerza en favor de otros movimientos que lo han suplantado en el terreno de la violencia política y Marine Le Pen pasa el relevo a nuevas generaciones en su formación política. A las elecciones de 2027 también concurre Benjamin Safarti, una estrella televisiva de «talk shows» que viene a ser, sin nombrarlo en la obra, la reencarnación de Cyril Hanouna, el equivalente del presentador español Jorge Javier Vázquez en Francia. Houellebecq arremete contra una interminable cadena de personajes de los mundillos políticos y periodísticos parisinos, unos más reconocibles que otros, y en algunos casos dejando caer sobre ellos difamaciones en la ficción sobre hábitos sexuales o maldades inconfesables. Una delicia para el morbo del lector.

Defensa del cristianismo

«Anéantir» juega mucho al despiste al entrelazar realidades y superponer varios planos en ese escenario de 2027. En ciertos tramos se trata de un thriller político cargado de adrenalina con atentados y espionaje. Sin embargo, no es solo eso. Es también todo un melodrama familiar centrado en una cuestión fundamental que también tiene una lectura social actual: el tratamiento de la muerte en las sociedades occidentales a partir de un infarto cerebral que deja en coma al padre de Paul. La cuestión vital de cómo nos enfrentamos a la muerte tanto personal como socialmente. Este asunto acaba alcanzando al protagonista, Paul Raison, quien se contentaba con vivir acomodadamente sin fe, sin cuestionamientos espirituales y que siente la crisis del vacío que deja el colapso del cristianismo en la sociedad. De nuevo, la religión de fondo en los debates del siglo XXI y la abierta y acérrima defensa del cristianismo del escritor francés.

“El autor vaticina otro gobierno socialista para España en 2027 que «da buena acogida a los inmigrantes””

Una de las grandes paradojas de la nueva novela de Houellebecq es que, poniendo el eje en temas de salud y medicina y del final de la vida, no menciona ni una sola vez a la Covid-19. Nos situamos en un 2027 en el que es todo un misterio qué acabó pasando con el virus, si fue derrotado o acabó derivando en un catarro. Ahí Houellebecq ha preferido guardar una bola de cristal que sí que vuelve a sacar para hablar de España. Nuestro país sale también reflejado a propósito de la cuestión de la inmigración, uno de los grandes desafíos de nuestro tiempo y temática recurrente en el universo novelístico del autor francés. Houellebecq describe un panorama donde pellizca a un nuevo gobierno socialista español que «da buena acogida a los inmigrantes» teniendo en cuenta que son francófonos y su objetivo es «cruzar los Pirineos lo antes posible». Con el lanzamiento de su libro, y aunque prometió en el pasado no dar más entrevistas, Houellebecq salió de su silencio la semana pasada en las páginas del diario «Le Monde» intentando alejarse de esa imagen de provocador nihilista y afirmando que «con buenos sentimientos es con lo que se hace buena literatura». Para varios críticos literarios, «Aniquilar» quizá ponga de relieve la faceta menos habitual y cristiana del autor. Una especie de creencia en el amor como redención. Aunque sus primeros libros de poemas pasaron bastante desapercibidos, la publicación de las novelas de Houellebecq desde 1994 está siempre acompañada de polémicas y escándalos que hacen la función del mejor márketing para sus ventas. Las religiones han ocupado siempre un puesto privilegiado en sus provocaciones y su figura de visionario tuvo el punto culminante en 2015, cuando lanzó su novela «Sumisión», en la que imaginaba la elección de un presidente musulmán para la República coincidiendo con los fatídicos intentados contra el semanario satírico «Charlie Hebdo» y el supermercado de comida kosher que tuvieron lugar apenas dos días después de la matanza de doce trabajadores de la publicación.

La editorial Flammarion ha lanzado «Anéantir» con una tirada inicial de 300.000 ejemplares. El propio autor supervisa al milímetro los detalles de la edición, como el grafismo, el gramaje del papel –ya que exigió que no debía amarillear con el tiempo– o la tipografía. La novela llegará a nuestro país de la mano de Anagrama, en castellano y catalán, a finales de agosto, cuando ya sepamos si Macron ha ganado las próximas presidenciales y la nueva profecía de Houellebecq ha empezado a cumplirse.

De nuevo «pirateado»

Aunque lleve solo cuatro días en las librerías francesas, la nueva novela de Houellebecq ya venía circulando por internet los días previos a su publicación en distintos formatos electrónicos para su descarga ilegal. Esto prueba la gran expectación que despierta cada obra de uno de los autores franceses más vendidos y traducidos por el mundo. Coincidiendo con los días de Navidad, «Le Parisien», el primero en transmitir dicha información, señalaba que ya existía un archivo PDF en una página web que otro usuario de Twitter presumía tener. Hervé Bienvault, bloguero especializado en libros electrónicos, rastreó la pista señalando que se llegaron hasta las «8.000 descargas desde un solo sitio de Quebec», y existían «muchas opciones posibles», como «un servidor ruso» y «sitios espejo bien conocidos en los círculos académicos». La editorial Flammarion respondió que sus servicios jurídicos e informáticos estaban haciendo todo lo posible para conseguir el cierre de las páginas de internet en cuestión aunque desde entonces los problemas han sido múltiples para combatir el «pirateo». Por ejemplo, el primer sitio web en el que Flammarion encontró «Anéantir» está domiciliado en EE UU, y a continuación enlaza con varios sitios de almacenamiento domiciliados en Francia, Alemania y EE.UU. El proceso de «matar» con éxito todas estas páginas es extremadamente tedioso. Y, como ha señalado la Prensa, no es la primera vez que Houellebecq es «hackeado». A finales de diciembre de 2014, «Sumisión», cuyo lanzamiento estaba previsto para el 7 de enero de 2015, también lo fue. El castigo por la «piratería» de libros electrónicos sigue siendo escaso. Solo un caso así ha llegado a los tribunales galos: en mayo, el de Nanterre condenó a nueve personas, miembros del «Equipo AlexandriZ», que «piratearon» casi 24.000 títulos entre 2010 y 2013.