Sección patrocinada por sección patrocinada

Muere Alfredo Landa

Recuerdo de las bondades; por Mario Camus

La Razón
La RazónLa Razón

Estoy bastante emocionado por la muerte de Alfredo Landa. En el trabajo que abordamos juntos, «Los santos inocentes», estuvo realmente maravilloso. La prueba es la propia película que hicimos. Ahora, cuando lo recuerdo, sólo me salen las bondades que tenía. Landa era un verdadero actor de raza, una persona muy considerada cuando trabajabas con él. Era un auténtico placer verle trabajar. Recuerdo que dio a su personaje parte de su personalidad. Lo rodeó con unos registros que yo entonces ignoraba que él poseyera. Sin duda, él ha sido uno de los grandes actores con los que he trabajado a lo largo de toda mi carrera. Era único. Una gran personalidad y un excelente actor.