Cultura
Retiros creativos en la naturaleza, una tendencia en auge frente a la tiranía digital
Cada vez es mayor para muchos adultos la necesidad de desconectar de las pantallas y recuperar la calma
Un corro espartero en la Sierra de Cazorla, un taller de serigrafía en la isla de Arousa, fotografía en el Cabo de Gata o escritura en Ávila; naturaleza y creatividad es una combinación cada vez más buscada a juzgar por la explosión de retiros creativos en España en los últimos años. La necesidad de desconectar de las pantallas y recuperar la calma y la imaginación impulsa a muchos adultos, en su tiempo libre, a participar en este tipo de iniciativas que no requieren experiencia previa y que han proliferado especialmente después de la pandemia de covid, han señalado a EFE sus organizadores.
Hay talleres dedicados a la lectura, como los que organiza Un Remanso; de perfumería, acuarelas y tapices en Marruecos, como los de Arxipelag Creatiu; artistas que abren sus talleres al público como La Platanera, O Castro Art Village o La Madriguera de Paula Bonet, que también organiza "talleres nómadas" durante viajes a ciudades como Nápoles o Lisboa. Y también encuentros con escritores que buscan inspirar, como los de Estar en Babia o Islados o para sacar al escritor que muchos llevan dentro.
Retiro de escritoras, volver a conectar
Hadassa Fernández Fariña (Barcelona, 1987) preparó oposiciones para juez y trabajó en un banco antes de apostar por las letras y matricularse en el Máster de Narrativa de la Escuela de Escritores, que le llevó a acabar organizando sus propios talleres "online". En 2016 se fue a Allariz, en Galicia, para terminar de escribir un libro y ahí empezó a pensar en la posibilidad de hacerlo acompañada. Buscó en Internet pero no encontró nada y, finalmente, años después, fue ella quien se lanzó con una propuesta de retiro de escritura para mujeres después de encontrar una casa adecuada en Candeleda (Ávila) y reservarla para un fin de semana.
"Me escribieron más de 200 mujeres, así que enseguida reservé dos fechas más y desde entonces han sido casi dos años en los que he hecho retiros prácticamente una vez al mes", dice a EFE la promotora de Retiro de Escritoras. Las asistentes son mujeres de 25 a 73 años que, en su mayoría, sostienen que escribían de pequeñas pero que en algún momento lo abandonaron. "Es muy sanador tanto para el proceso creativo como para una misma, hay mujeres que me han dicho que vivir la experiencia les ha cambiado la vida", asegura.
Son solo para mujeres porque, en sus cursos, Fernández Fariña se dio cuenta de que ellas se abrían más cuando ellos no estaban, "quizá también porque se trata de una escritura que a veces es muy íntima". A su juicio, el punto de inflexión en la proliferación de este tipo de iniciativas fue el Covid, que obligó a muchas personas a parar y mirar hacia adentro e hizo que se plantearan un cambio de rumbo y que afloraran las ganas de "reconectar y estar en la naturaleza con otros".
La Platanera, un refugio para la creatividad en una isla
Andrea Fernández Plata (A Illa de Arousa, 1985) estudió Comunicación y Publicidad en Madrid pero volvió a Galicia y se formó en el arte del grabado en la Fundación CIEC; así descubrió lo que le hacía feliz y decidió ir a por todas. De familia marinera, en 2012 montó su taller en la que fue la casa de pescadores de sus abuelos, en la isla de Arousa, una isla de 7 km cuadrados en las Rías Baixas donde empezó a organizar talleres, al principio con gente de la isla.
Ahora viene gente hasta de Colombia o Nueva York, asegura Fernández Plata, aunque ella se afana en mantenerlo a pequeña escala -no suele admitir más de diez participantes- y en sintonía con el entorno. La Platanera acoge talleres de escritura, de ilustración, fotografía, cianotipia, serigrafía, cerámica, joyería, cestería, macramé o caligrafía en un espacio que quiere ser de "recogimiento y creatividad", dice.
Las participantes son sobre todo mujeres, en algunos casos con una formación o bagaje en la escritura o el diseño, pero "el 80% son personas que solamente quieren disfrutar de la isla y trabajar con las manos para desconectar un poco". El año pasado Fernández Plata publicó su primera novela, "Jarroa" (Caballo de Troya), que define como "un canto de amor a la tierra, un conjuro" y en la que retrata historias de la isla que ofrecen un contrapunto a "la imagen que se tiene de la zona" con la proliferación de series sobre narcotráfico.
Estar en Babia, un antes y un después
La literatura y el paisaje son también los grandes alicientes de Estar en Babia, un retiro que se celebra en la comarca leonesa de la que deriva la conocida expresión que le da título y que alude a un entorno que invita al ensimismamiento. Organizado por la consultora de comunicación Prodigioso Volcán, fundada por el fallecido periodista y pionero en la innovación digital Mario Tascón, en julio pasado celebró su cuarta edición con los escritores David Uclés y Nuria Labari como principales ponentes.
Además de las charlas suele haber talleres artesanales, de collage, tipografía o similares, experiencias gastronómicas, caminatas y actividades turísticas, y un día en el que el encuentro se abre a la participación gratuita de los vecinos de la zona. El perfil de los participantes, según Carolina Miyata, socia y directora general de la consultora, es a menudo el de personas en transición, a punto de dar un giro a sus vidas, como le pasó a ella misma, que dejó su puesto de directiva de una gran empresa tras participar en la primera edición en 2022.
Son cuatro días de retiro en los que se busca "resetear" y disparar la inspiración a través de la escritura y la creatividad. "Es una forma de escapar de un día a día loco, vamos cada vez más rápido, necesitamos parar y la naturaleza es sanadora", señala.